TW
4

El vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes, ha presentado este miércoles el IV Plan de Fosas, cuyo objetivo es intervenir en las últimas fosas de la Guerra Civil que quedan y donde es «viable» encontrar víctimas de la represión franquista. Hasta ahora, se han podido recuperar los restos de un mínimo de 220 personas, de las cuales ya se han identificado 40. La última fue el joven alaroner de 18 años Jaume Ordinas Arrom, asesinado a principios de 1937 en Porreres.

«Queremos acabar la legislatura habiendo intervenido todas las fosas de las que tenemos evidencias y cumplir así con los Acuerdos de Bellver de no dejar ninguna fosa sin abrir», ha señalado Yllanes. «Cualquier sociedad democrática madura debe asegurar el derecho a la verdad, a la memoria y a la reparación y reconocimiento de las víctimas», ha añadido durante la presentación del plan junto al Muro de la Memoria del Cementerio de Palma .

El nuevo Plan, según ha dicho, es el más ambicioso de los impulsados hasta la fecha y tiene un presupuesto de más de 1,3 millones de euros. Pretende completar el trabajo de exhumaciones ejecutado en las Islas desde que en 2014 se llevó a cabo la primera intervención de una fosa en Balears.

La representante de la Comisión de Fosas y desaparecidos, Maria Antònia Oliver, ha destacado la labor que han hecho las comisiones de memoria democrática en este IV Plan que, por primera vez, recoge una visión multidisciplinar en muchos aspectos, desde la historia hasta la psicología o los derechos humanos.

El plan contempla la exhumación de un mínimo de ocho localizaciones, incluyendo una tercera y última fase de intervención en el cementerio de Son Coletes, en Manacor. También está prevista una primera intervención en la Cala de Sant Vicenç, en Pollença, y una segunda fase de intervención en el cementerio de Sant Francesc de Formentera, donde ya se llevó a cabo una primera intervención en marzo de este mismo año.

Asimismo, se hará la exhumación de las fosas ligadas al desembarco del capitán Alberto Bayo en Mallorca y, en concreto, las de la playa de Sa Coma; la zona del antiguo hospital de sangre; la finca de Son Escrivà, y el interior y exterior del cementerio de Son Carrió. Será la primera vez que el Govern emprende tareas de exhumación de fosas de la Guerra Civil en Mallorca y ya está en contacto con la Generalitat de Catalunya y otras administraciones autonómicas para coordinar la localización de familiares de cara a una posible identificación de las víctimas.

Al mismo tiempo, este IV Plan llevará a cabo cinco estudios históricos más sobre la viabilidad de una serie de fosas catalogadas como dudosas. Se trata de una posible fosa en un aljibe situado entre los municipios de Esporles y Bunyola (Mallorca); la fosa del cementerio de Son Servera (también en Mallorca); y las posibles fosas de Sant Llorenç de Balàfia (en Ibiza) y del cementerio viejo de Sant Francesc, la Mola y els Pujols (en Formentera). El estudio permitirá confirmar o descartar futuras intervenciones y supondrá liquidar los trabajos de exhumación en las Pitiusas. Así mismo, el plan incluirá la elaboración del Mapa de Fosas de Menorca, que se sumará a los ya existentes mapas de fosas de Mallorca, Ibiza y Formentera, y permitirá completar el Mapa de Fosas de Baleares.

Estudios multidisciplinares

Una de las principales novedades del plan, respecto de los anteriores, es la realización de una serie de estudios multidisciplinares, con los que se quiere profundizar en todos los ámbitos relacionados con la memoria democrática y dar un paso más allá de la posible localización de fosas y enterramientos de víctimas de la Guerra Civil y la represión franquista. En concreto, prevé la elaboración de 15 estudios que analizarán, entre otros, el exilio provocado por el franquismo, el impacto de los bombardeos a y desde Baleares, y la política de memoria que impuso la dictadura.

También supone una novedad respecto a las experiencias anteriores la realización de 12 exposiciones gráficas que tendrán por objeto la pedagogía vinculada al derecho de garantías de no repetición y que incluyen muestras sobre los lugares de represión en las Illes Balears, los espacios de la memoria, o la evolución del trauma transgeneracional a partir del Golpe de Estado de 1936, así como una exposición sobre la memoria y la apertura de Fosas en Baleares (2014-2022).

Además, por primera vez, se contará con la figura del psicólogo o de la psicóloga para acompañar a las víctimas de la represión durante todo el proceso de exhumación. Así mismo, y también por primera vez, es imprescindible la especialización en derechos humanos para la realización de cada uno de los diferentes lotes que componen el Plan.