Imagen del juicio.

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La Audiencia Nacional repite su absolución a los antiguos directores generales de Sa Nostra, Pau Dols y Pere Batle. El tribunal ha notificado este lunes su segunda sentencia tras el juicio por posibles delitos de administración desleal y apropiación indebida por las operaciones de crédito al Grupo Martín Gual para las promociones de Son Bordoy. La conclusión es la misma: no hubo delito.

La Sala de Apelaciones de la Audiencia Nacional ordenó hace un mes al tribunal repetir la sentencia. Admitió los recursos planteados por la Abogacía del Estado, en representación del Frob y de la Fiscalía. Achacó a la primera sentencia no haber valorado de forma suficiente los distintos informes periciales de Banco de España sobre estas operaciones. Ahora, la Sala despacha una sentencia de cerca de 80 páginas en las que sostiene que: «El origen de los hechos se halla en el deseo de los directivos de Sa Nostra de paliar el problema suscitado por la situación de insolvencia de facto de grupos mercantiles que tenían una importante financiación con la caja». Ante esa situación, recurrieron a Gual «no con el ánimo de beneficiarle a él en perjuicio de la entidad, sino porque pensaron que era el idóneo».

Insiste la sentencia en que si la operación fracasó fue por motivos ajenos a los acusados y que los movimientos de fondos, «se enmarcan en el funcionamiento habitual de empresas». Valora que las periciales que fuerzan la repetición de la sentencia no son suficientes para cambiar el sentido del fallo y justificar una condena. Ahora, de nuevo, esta resolución puede ser apelada.