Roberto trabaja de jardinero en Projecte Home. | Pilar Pellicer

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Tocar fondo a veces es el mejor final para abrir bien los ojos. A Roberto Salas, de 26 años, le pasó en 2019. Fue entonces cuando pidió ayuda para acabar con su adicción a la cocaína, un consumo casi diario –algunos días se llegó a gastar más de 200 euros– que comenzó en 2014.

«No tenía ninguna motivación, ni ilusión, ni trabajo. Tuve la mala suerte que en mi profesión –pintor–, la mayoría también consumía cocaína y eso no me ayudaba. Físicamente, también me encontraba mal y entré en una profunda depresión. Toqué fondo y entré en Projecte Home Balears», explica.

Las primeras veces siempre son difíciles. Acudió al programa Horabaixa para recuperarse y recuerda que la primera etapa de su terapia le costó: «Es el momento en el que tenía que quitarme del mundo de la droga, y no solo el consumo, sino las amistades y el entorno. Los primeros meses, tuve el pensamiento de tirar la toalla, pero no lo hice. Cuando di el paso, y cambié de aires, el camino fue más fácil».

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Roberto Salas y el coordinador de Benfet, Víctor Reyes.

Su mujer, con quien comparte su vida desde hace diez años, ha sido su apoyo fundamental y su seguimiento durante las terapias.También lo fueron su hermano y sus padres. Roberto se convirtió en padre hace un año y medio del pequeño Hugo, y hace un mes que le dieron el alta.

Otra oportunidad

Tras el esfuerzo, le llegó la recompensa. A los pocos meses de terapia, y tras quedarse sin trabajo, entró en un servicio laboral para trabajar como jardinero. Con el tiempo, este servicio se convirtió, en abril de 2019, en una empresa, Benfet Serveis i Manteniment, que Projecte Home presentó ayer. Ofrece diversos sectores profesionales para colectivos vulnerables.

El coordinador del proyecto, Víctor Reyes, explica que la decisión de crear una empresa así se tomó tras detectarse «la falta de acompañamiento a los usuarios. Las personas que trabajan en Benfet ya entran con un contrato laboral ligado a un plan de trabajo y a un técnico que les supervisa. Se realizan seguimientos y ellos mismos van cumpliendo objetivos», señala.

Actualmente hay siete usuarios inscritos a esta nueva entidad. Algunos de los requisitos es que estén en riesgo de exclusión social y demuestren que están en paro. A los usuarios se les contrata    29 horas semanales y por un máximo de tres años. Projecte Home hace, a su vez, de puente para otras empresas, sean públicas o privadas, a fin de que consigan más contratos laborales.