Visita de los alumnos del curso 2019-2020 a la empresa Ecoquímic Balear. SL. | Ecoquímic Balear. SL.
Los programas de Formación Dual se alejan del modelo clásico de clases magistrales ofreciendo, a cambio, un modelo dinámico de alternancia de formación y trabajo que permite contrastar los contenidos teóricos con la práctica laboral.
Esta metodología, que se ha revelado como muy exitosa en múltiples sectores, posibilita que el alumno pueda aprender y formarse al tiempo que dispone de un contrato con remuneración, una tutoría dentro de la empresa y una inserción dentro de la cultura empresarial. Por si todo ello fuera poco, el alumno obtiene un Certificado de Profesionalidad que le reconoce su capacitación profesional.
Adquirir 'conocimiento y experiencia'
Pilar Muntaner, técnica de seguridad química y formación en el CliQIB, se muestra muy ilusionada ante los preparativos de la nueva convocatoria del SOIB: 'Esperamos conseguir gente cualificada que quiera adquirir conocimiento y experiencia para trabajar en las empresas de nuestras islas', explica al respecto. En esta ocasión el Programa se realizará durante un año y previsiblemente se iniciará a finales de mayo de 2021. En la pasada convocatoria la pandemia trastocó los planes previstos, provocando incluso que muchos alumnos al final no pudieran materializar la parte práctica.
Muntaner apunta que, para este año, las perspectivas son “inmejorables”. La captación de alumnos empezará esta misma semana a través de diversos canales y una campaña de promoción del Clúster. Una vez el SOIB resuelva la convocatoria, los alumnos podrán empezar a inscribirse. “Cuando estén todos inscritos entonces nos reuniremos con empresas y alumnos y mantendremos varias entrevistas antes de comenzar el Programa”, añade la portavoz del CliQIB.
Dieciséis empresas participantes
Por ahora se han interesado un total de 16 empresas del sector químico de nuestras islas para participar en la presente convocatoria del Programa de Formación Dual.
Se trata de empresas asociadas a CliQIB distribuidas entre fabricantes, laboratorios, distribuidores y consultorías. El Clúster no percibe ninguna cantidad de las subvenciones; son las empresas quienes reciben directamente las prestaciones por parte del SOIB para poder financiar así el contrato laboral durante los doce meses de formación del alumno. Otra parte de la subvención es para la entidad formativa reconocida por la Conselleria de Model Econòmic, Turisme i Treball para emitir el correspondiente certificado, que en este caso es la Fundació Universitat Empresa de les Illes Balears (FUEIB) y que será la encargada del proyecto formativo.
Margalida Furió, directora de Formació i Congressos de la FUEIB, puntualiza que, con este modelo de formación, las empresas, gracias a la financiación del SOIB, “podrán tener nuevos trabajadores en formación específica y de aplicación directa en la empresa durante un año. Es un camino para la inserción de futuros trabajadores después de todos estos meses de adaptación y tutoría. Además, siempre surgen oportunidades de generación de nuevos productos y mecanismos de organización por el hecho de incorporar jóvenes preparados en las empresas. El proyecto es posible gracias al Clúster, que actúa como elemento dinamizador y cohesionador de empresa, universidad e innovación”.
'Los alumnos estudian, trabajan y cobran todo el tiempo. Durante un año se ponen en contacto entre sí alumnos y empresas. De esta forma los alumnos tienen la oportunidad de entrar en una empresa y darse plena cuenta de la realidad'.
Por su parte, Joan Miquel Matas, director del CliQIB, argumenta que “lo que más valoramos en el Clúster es la posibilidad que los alumnos inscritos puedan quedarse contratados en las empresas como personal estable. También pensamos que este Programa mejora las capacidades de recursos humanos de las empresas. Tener a prueba a un alumno con salario cubierto es una gran oportunidad para todas las empresas que quieran mejorar el nivel de sus plantillas. En definitiva, creemos que, por una parte, se ofrecen buenas oportunidades para gente joven (de menos de 30 años) y, por otra parte, es una magnífica ocasión de mejora para nuestro sector porque se incrementa el nivel profesional de los trabajadores en plantilla”.
Matas opina que este programa de Formación Dual “es el mejor de todos, con diferencia, porque los alumnos estudian, trabajan, cobran todo el tiempo, y a la empresa no les cuesta nada. Durante un año se ponen en contacto entre sí alumnos y empresas. De esta forma los alumnos tienen la oportunidad de entrar en una empresa y darse plena cuenta de la realidad”.
El 40% queda contratado en las empresas
Hasta ahora el CliQIB ha participado en dos convocatorias de Formación Dual. El porcentaje de alumnos que han logrado quedarse en las empresas roza el 40%. Todo un éxito si tenemos en cuenta que muchos de estos jóvenes han encontrado su camino profesional a través de este programa. La movilidad también es importante, con un porcentaje considerable de alumnos que han empezado sus prácticas en una empresa y luego han terminado contratados en otra, incluso con contrato fijo.
Un ejemplo es Fernando Arcos, que ahora tiene 28 años y que hizo el nivel 2 de Formación Dual del Clúster, encontrando así su camino profesional: “yo era entrenador de futbol para niños por las tardes y empecé la Formación Dual a finales del 2019 en la empresa Comercial Pedrosa, donde se me brindó la oportunidad de formarme. Ahora estoy trabajando en dicha empresa en el departamento de servicio técnico de dosificaciones automáticas en productos químicos. Mi experiencia de formación dual ha sido satisfactoria, ya que gracias a ello actualmente tengo un trabajo fijo que me gusta. Doy las gracias a la empresa, a compañeros, a profesores, en particular a Pilar, y al tutor de mi formación por la paciencia y dedicación que han tenido para ayudarme a conseguir todo lo que he obtenido hasta el día de hoy”.
Una vez termina el programa, queda claro que no hay ninguna obligación de la empresa de contratar al alumno; tampoco la hay por parte de éste de quedarse en la empresa, si no es su deseo. El programa no se renueva automáticamente, hay que esperar a una nueva convocatoria del SOIB que se realiza cada año. Muntaner también es profesora de uno de los módulos del programa. Mantiene contactos profesionales con los alumnos y también actúa de intermediaria entre los alumnos y las empresas. Según su valoración, “la mayoría están contentos y agradecidos por la oportunidad que se les ha dado de conocer una empresa relacionada con el campo de estudio y hacer trabajos relacionados con este tema, adquiriendo una experiencia profesional que a veces es muy difícil de conseguir dentro del sector universitario en el que se mueven”.
A la búsqueda de un módulo formativo y un certificado específico adaptados a las necesidades reales del sector
Una de las particularidades del sector químico, especialmente el que está mayoritariamente enfocado hacia el turismo como en el caso de Balears, es la necesidad de contar con una formación de conocimientos diversa y multidisciplinar. El problema es que este conocimiento multidisciplinar no está reglado en ningún certificado, ni en ninguna carrera específica; se debe adquirir a base de pequeños bloques de formación y, sobre todo, con experiencia profesional.
Al respecto, Joan Miquel Matas reclama “un módulo formativo que pueda ofrecer todos estos conocimientos conjuntos, y que sea reconocido por un certificado profesional que en estos momentos no existe”. Como solución, el director del CliQIB apunta varias alternativas: “nosotros seríamos capaces de aportar el material didáctico y los profesores -puntualiza- porque conocemos las personas apropiadas y capaces de hacerlo”. Para ello se necesitaría, además, un espacio habilitado expresamente que desde el Clúster piensan enlaza con el proyecto Aqualab previsto en el campus de la UIB y que podría ser una realidad dentro de un año. En el CliQIB están convencidos que este espacio debería ser el lugar más apropiado para hacer la formación.
Aqualab será un centro de investigación y formación, con una superficie de unos 500 metros cuadrados, con dos aulas de formación teórica, una aula taller, tres laboratorios (dos de química y uno de microbiología) y tres piscinas para hacer investigación. Todo ello financiado con un convenio entre la UIB y el Govern a través del impuesto turístico sostenible y fondos FEDER. Matas insiste que “el objetivo final sería que nosotros mismos pudiéramos desarrollar y emitir un certificado de profesionalidad para nuestro sector. También nos gustaría organizar cursos de más de 25 alumnos porque sabemos que hay demanda para ello”, concluye.
A finales de este mes de mayo, el Clúster de la Indústria Química de les Illes Balears (CliQIB) pondrá en marcha su tercer programa de Formación Dual dirigido a los alumnos que quieran adquirir un aprendizaje teórico y práctico adaptado a la realidad empresarial del sector químico de nuestras islas. Se trata de un programa de formación dual ofrecido por el Servei d’Ocupació de les Illes Balears (SOIB) para sectores estratégicos como es el caso de la industria química, considerado como un sector innovador y estratégico para la salud pública, el turismo y desarrollo sostenible.