Pons Delgado Transporte es una de ellas y según su propietario, Mirko Pons, la situación es insostenible.

TW
2

Empresas mallorquinas de transporte se están viendo obligadas a poner el cartel de se vende, ya que la crisis provocada por la pandemia les ha dejado sin liquidez y recursos para seguir adelante.

Pons Delgado Transporte es una de ellas y según su propietario, Mirko Pons, la situación es insostenible. «Con la pandemia nos hemos endeudado con los bancos y los créditos ICO, visto lo visto, no son la solución porque las perspectivas de recuperación no se atisban. Esta situación, por falta de actividad turística, nos ha obligado a tomar esta drástica situación por estar parados desde octubre de 2019».

Pons añade que «hemos aguantado hasta el final, pero no queda más remedio que vender». Su empresa está compuesta por una flota de 14 vehículos. Lo mismo sucede en otras empresas pequeñas de la Isla que están en venta al no poder hacer frente a las deudas bancarias y que tienen flotas de hasta 20 vehículos.

Los precios que se barajan en las operaciones de compraventa oscilan entre los 700.000 y un millón de euros, aunque ello depende la flota y el nivel de deuda bancaria que se tiene que asumir.

El presidente de la Federación Empresarial Balear de Transporte (FEBT), Rafael Roig, puesto a corriente de estos movimientos, señala: «La situación es difícil y crítica en el sector del transporte y urge una campaña de vacunación efectiva para tener verano».