Imagen del centro de refugiados de Son Rapinya. | M. À. Cañellas

TW
14

Baleares ha acogido 526 refugiados desde que se abrieron en 2016 y 2018 los dos centros de acogida que hay en Mallorca, el de Playa de Palma y el de Son Rapinya, gestionados por la Cruz Roja.

Según ha informado Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes este sábado en nota de prensa, la consellera del ramo, Fina Santiago, ha reivindicado «el compromiso solidario y responsable del Govern» con las personas que se ven obligadas a dejar su casa.
En esta línea, ha afirmado la consellera, «con el Govern, Baleares están en la Red de Atención a los Refugiados asumiendo un compromiso de pueblo solidario y responsable frente al sufrimiento de millones de personas que tienen que dejar su casa por varios motivos».

Asimismo, la Conselleria ha detallado que de las 526 personas que han estado en uno de los dos centros de las Islas desde su apertura, 314 son hombres, 212 son mujeres y 144 son niños. La mayoría de ellas procedían de Venezuela (160), Colombia (123), Siria (69) y El Salvador (65).

Con todo, ha señalado que ambos centros se encuentran cedidos por la Conselleria a Cruz Roja y el proceso de asignación de plazas depende del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social a través del Sistema Nacional de Acogida e Integración.

Por otro lado, la Conselleria ha recordado que su tarea en esta materia tiene una doble vía, por un lado, la Red de Atención a los Refugiados; mientras, por otra parte, las políticas de cooperación internacional.

Atendiendo a esta segunda vía, la consellera ha asegurado que «la cooperación internacional siempre ha sido un instrumento de justicia social. Hay que recordar que los campamentos de refugiados más importantes del mundo y los países que acogen más refugiados no son europeos, como muchos podrían pensar, son países del sur».

Por este motivo, ha añadido, «una de las líneas de cooperación que desarrolla el Govern es dar apoyo económico y técnico a los países que acogen a personas desplazadas».
En esta línea, la Conselleria ha hecho hincapié en que los últimos cinco años el presupuesto destinado a proyectos de cooperación con personas refugiadas en países del sur ha sido de 3.550.000 euros. Las políticas de cooperación al desarrollo que lleva a cabo tienen como objetivo dar estabilidad en países empobrecidos, evitar situaciones de conflicto armado o crisis humanitarias, que son los principales generadores de personas refugiadas.

Asimismo, ha indicado que la Dirección General de Cooperación también ha desarrollado proyectos específicos con personas refugiadas en países como Burundi, Colombia, República Democrática del Congo, Jordania, Líbano, Palestina o la República Centroafricana, con el objetivo de proteger la vida, los derechos y la dignidad de las personas, y de garantizar su subsistencia y los servicios básicos.

No obstante, ha matizado, el principal esfuerzo con este colectivo se ha hecho en campamentos de refugiados de Tinduf, donde hace más de veinte años que el Govern financia proyectos para la gente del Pueblo Saharaui.

Con todo, ha concluido, la atención a las mujeres refugiadas, que son víctimas de doble discriminación, es también uno de los ejes prioritarios de trabajo desde el 2019, gracias a la colaboración con el Institut Balear de la Dona a través del Pacto de estado contra las Violencias Machistas.