El regreso a la actividad laboral de miles de trabajadores mantiene vigilantes a las autoridades ante un posible repunte de las infecciones. | Efe

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Cuál es el riesgo de que se produzca un aumento significativo de los contagios de coronavirus en Baleares tras la vuelta al trabajo de los empleados de las actividades no esenciales. El confinamiento generalizado de la población parece haber tenido evidentes signos positivos en la evolución de la crisis de la COVID-19, y algunos se muestran reticentes a un relativo regreso a la normalidad, como mínimo, en lo que atañe a la actividad laboral.

Este sábado la consellera de Salut Patricia Gómez, a preguntas de los periodistas, ha lamentado que el Gobierno haya descartado prolongar el confinamiento de la inmensa mayoría de los trabajadores, en el caso de Baleares más allá del martes 14 de abril, algo que expresamente pidió en su día la presidenta del Govern, Francina Armengol.

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Sobre esta cuestión, el portavoz del comité autonómico del coronavirus, Javiar Arranz, ha apuntado que «dejar de aplicar medidas de confinamiento estrictas siempre nos da algo de miedo», sin perjuicio de que en esta decisión se deba atender a otros factores que no son sanitarios.

«Es un riesgo, pero en algún momento hay que asumirlo», ha añadido Arranz, manifestando que lo importante es seguir vigilantes en la situación para prevenir posibles repuntes de contagios y actuar con la mayor celeridad posible en el caso de que estos se produzcan.