Desde el 1 de agosto de 2018, cuando entró en vigor la nueva Ley de Turismo, se han vendido 14.297 plazas para el alquiler turístico en Mallorca, de las que la mayoría son para pisos, aunque ninguno está en Palma, ya que en la ciudad no está permitido el alquiler vacacional en plurifamiliares. | Gabriel Alomar

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En poco más de un año ya se han vendido el 72 % de las plazas disponibles para alquiler turístico en Mallorca, según los datos facilitados por la Conselleria de Turisme. Desde el 1 de agosto del 2018, cuando se levantó la moratoria en la concesión de estas plazas, la Conselleria de Turisme ha vendido 14.397 plazas para alquiler turístico de las 20.000 que estaban a la venta.

Antes de que se aprobara la moratoria no existía ningún límite en el número de plazas y los propietarios tampoco pagaban por obtenerlas, más allá de una tasa administrativa. Con anterioridad a la entrada en vigor de la nueva Ley de Turismo, solo se concedían plazas de alquiler turístico para viviendas unifamiliares.

De las 14.297 plazas que se han vendido desde agosto del pasado año, 4.268 corresponden a viviendas unifamiliares y 9.195 a pisos. Si se toma una media de cuatro plazas por piso, en Mallorca hay alrededor de 2.300 pisos con autorización para el alquiler turístico.

Zonificación

Hay que tener en cuenta que solo pueden obtener la licencia aquellos que se encuentran en zonas aptas de acuerdo a la normativa aprobada por el Consell de Mallorca la pasada legislatura. Asimismo, se han vendido 934 plazas de viviendas habituales, es decir, aquellas que no pueden destinarse al alquiler turístico más de 60 días al año.

Con la venta de estas plazas, la Conselleria ha ingresado 23,25 millones de euros. A esta cantidad hay que sumar el dinero obtenido por las plazas hoteleras que se han vendido en este período. De las 10.000 que había disponibles, se han adquirido 2.682, por las que se han recaudado 9,38 millones. En total, la Conselleria ha ingresado 32,64 millones. Este dinero corresponde al Consorcio de Bolsa de Alojamientos Turísticos (CBAT), integrado por Govern, Consell y agentes sociales y económicos, que determina los proyectos que se van a financiar con este dinero y que engloban inversiones municipales para la reconversión, modernización, diversificación y desestacionalización de la oferta turística de toda la Isla

A principios de mayo de este año se aprobó una convocatoria de 21,9 millones para cofinanciar 64 proyectos a desarrollar en 34 municipios mallorquines, ya que el CBAT puede cubrir como mucho el 80 % del coste del proyecto, con un importe máximo de 500.000 euros, y los ayuntamientos tienen que aportar el resto.

Por tanto, en la caja del CBAT quedan 10,7 millones para futuras convocatorias. Desde la Conselleria de Turisme recordaron que el dinero proveniente de la venta de plazas permite a los ayuntamientos poder efectuar inversiones fundamentales para sus municipios, de modo que no solo cuentan con los fondos de la ecotasa para impulsar proyectos.

En estos momentos quedan 12.921 plazas turísticas por vender, de las que 5.603 son para el alquiler vacacional y otras 7.318, para hoteles.