El objetivo de la Agència de Defensa del Territori es la lucha contra las irregularidades urbanísticas y el restablecimiento de la legalidad. Las sanciones se pueden reducir notablemente si el infractor demole la irregularidad. Arriba, una infracción detectada por la ADT en Felanitx. | Assumpta Bassa

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La Agència de Defensa del Territori (ADT) ha recibido en solo dos meses 46 comunicaciones o denuncias anónimas por supuestas obras ilegales. Esta cifra contrasta con las cien denuncias formales recibidas a lo largo de todo el año 2017.

La posibilidad de cursar denuncias ante la ADT sin la obligación de facilitar el nombre se implantó a finales del mes de febrero. Con anterioridad, la Agència solo admitía denuncias formales, en las que el denunciante sí estaba obligado a facilitar su identidad.

Estas 46 denuncias anónimas se han recibido entre finales de febrero y el viernes pasado. No obstante, la mayor parte, 26, se tramitaron dentro de las dos primeras semanas de funcionamiento del servicio.

Prioridad

Hay diferencias entre las denuncias formales y las anónimas. Las primeras, en las que el denunciante debe facilitar obligatoriamente –por ley– su nombre y apellidos y su número de DNI, son tramitadas «con prioridad» respecto a las segundas, que no tienen la consideración legal de denuncias. La ADT ni siquiera se refiere a ellas como «denuncias» sino como «comunicaciones» que pueden tramitarse desde su ‘Portal de Colaboración Ciudadana’.

Esta web, a la que se puede acceder desde la plataforma digital de la ADT, contiene un formulario en que únicamente se pide al denunciante una dirección de correo electrónico; el número de parcela, el polígono y el municipio en qué se ha cometido la presunta infracción, el tipo de construcción levantada sin permiso (si es una vivienda, una edificación agrícola, una piscina, etc) y fotografías de la irregularidad.

Mercedes Garrido, consellera insular de Territori i Infraestructures y responsable política de la ADT, hizo un balance «positivo» del nuevo servicio. «Hay que tener en cuenta que la ADT ya es competente en todo el suelo rústico protegido y en más de la mitad de municipios de Mallorca. En este sentido, la colaboración ciudadana siempre viene bien y ayuda a la detección de infracciones, puesto que es imposible tener inspectores suficientes para llegar a todos los sitios».

Por otra parte, Mercedes Garrido recordó que la Agència de Defensa del Territori de Mallorca era «el único organismo de este tipo» que todavía no ofrecía la posibilidad de hacer denuncias anónimas.

Hay que recordar que la ADT solo tiene competencias en suelo rústico y, en ciertas circunstancias, en suelo urbano. Creada en el año 2009, la Agència estuvo prácticamente inactiva hasta el 2015, cuando el nuevo gobierno del Consell de Mallorca modificó sus estatutos y la dotó de más personal, entre otras actuaciones, con la voluntad de impulsar su operatividad.