Imagen de archivo de una águila perdicera. | Redacción Local

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El Plan de Reintroducción del Águila de Bonelli en Mallorca, que se ha llevado a cabo desde 2010, ha finalizado con éxito, dado que un estudio científico predice que la población de esta rapaz ya es autosostenible en la isla. En la actualidad hay 27 ejemplares en la isla y 6 parejas territoriales.

La Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca da por terminado con éxito dicho plan de reintroducción del águila perdicera o Águila de Bonelli (Hieraaetus fasciatus), que ha supuesto la liberación de 41 ejemplares en Mallorca, a los que hay que añadir otros 11 que han nacido ya en la isla, ha informado el departamento autonómico en un comunicado.

La población actual está formada por 27 ejemplares y 6 parejas territoriales, de las que 4 se han reproducido desde 2014, cuando voló el primer pollo nacido en Mallorca. Los resultados han superado las previsiones Plan de Reintroducción de esta especie, aprobado en 2008.

Las actuaciones las han llevado a cabo el Consorcio para la Recuperación de la Fauna de las Islas Baleares (Cofib) y la Fundación Natura Parc, con la contribución del Programa Life de la Comunidad Europea (Life Bonelli) y la colaboración de Red eléctrica de España, Vinyes Mortitx y Endesa.

A principios de 2017 el Cofib encargó al Equipo de Biología de la Conservación de la Universidad de Barcelona un análisis de viabilidad de la población del águila de Bonelli reintroducida en Mallorca.

Los resultados del estudio indican que la población es autosostenible, según las predicciones de los modelos demográficos, y se prevé que continuará en ligero crecimiento en los próximos años.

Este análisis ha permitido corroborar que se ha cumplido el objetivo del Plan de Reintroducción del Águila de Bonelli en Mallorca, que era conseguir una población autosostenible, de manera que Medio Ambiente da el plan por terminado.

En adelante, el Govern balear seguirá de cerca la evolución de esta especie, catalogada como en peligro en las Islas Baleares, ya que todavía requiere vigilancia y seguimiento para confirmar que las predicciones demográficas se cumplen y la población continúa estable o en ligero crecimiento.

El regreso de estas águilas es clave para los ecosistemas insulares, ya que son un elemento de control poblacional de especies que hasta ahora no tenían depredadores como la gaviota, la marta y el cuervo, entre otras.

Para llevar a cabo este plan, el Govern ha contado con la colaboración, la implicación y la participación activa de varios cientos de personas -trabajadores pero también voluntarios-, a quienes hoy ha agradecido «su compromiso con la conservación de la naturaleza balear».