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El sindicato CSI-F ha denunciado este miércoles que la implantación de las nuevas tecnologías en la Administración de justicia está provocado innumerables incidencias en los distintos juzgados de Mallorca, principalmente, en los de Manacor e Inca, aunque esta situación afecta al resto de instancias judiciales de la Isla.

Concretamente, el colapso se ha producido como consecuencia del proceso de actualización de las nuevas aplicaciones informáticas, que se inició el fin de semana pasado y que, a día de hoy todavía no ha finalizado, según informa el sindicato en un comunicado.

Ello ha provocado que «se produzcan grandes atascos en el funcionamiento de la oficina judicial, con interminables tiempos de espera, accesos no correspondientes ni al procedimiento ni al órgano que le está asignado, imposibilidad de imprimir o acceder al scaner», entre otras incidencias.

Con todo ha constatado que los «funcionarios responsables y sensibilizados con su trabajo no pueden desempeñarlo, por la continua ineficacia de una aplicación que el Ministerio de Justicia que se empeña en mantener, a pesar del grave perjuicio que ocasiona al ciudadano al no poder ser atendido como corresponde».

En este punto, el CSI-F denuncia el «poco interés» del Ministerio en todo lo relacionado con la implantación de las nuevas tecnologías en la Administración de Justicia.

Ante ello, «exige que los responsables procedan a la rápida subsanación de todos los problemas» derivados de esta «modernización, a la par que vayan informando de los pasos que se van dando, a fin de evitar el caos y que permita dar alguna explicación al ciudadano que es el mayor perjudicado por esta situación».

Por último, recuerda el CSI-F que, a instancias suyas, el Ministerio «se ha comprometido a convocar una reunión extraordinaria en breve para tratar en exclusiva este asunto».