La crisis ha llevado a muchas personas a pedir limosna. | Joan Torres

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La Oficina del Defensor de la Ciudadanía recibió en abril 16 quejas de servicios sociales, 10 de las cuales motivadas por el retraso en el pago de ayudas económicas urgentes. La oposición destacó que es la primera vez que el Defensor recibe quejas de servicios sociales.

Además, PSOE, Més y trabajadores de servicios sociales denunciaron que en abril no se pagaron ayudas económicas urgentes. La regidora de Benestar Social, Aina Ferriol, lo negó y aseguró que se tramitaron 1.583 ayudas; Tesorería confirmó que en abril se abonaron 304.578 euros.

La socialista Virginia Abraham también denunció problemas con la tarjeta de compra básica; criticó que algunas no tenían saldo y aseguró que personas que antes estaban en la Xarxa d'Aliments ahora no reciben ninguna prestación. La regidora de Benestar Social lo desmintió y destacó que ya se han repartido 1.300 tarjetas de compra básica, y añadió que si más personas necesitan ayudas les dan un talón o les hace una transferencia bancaria.

Pago en 48 horas

El equipo de gobierno rechazó las propuestas de la oposición de pagar en un máximo de 48 horas las ayudas de comida, higiene, luz, agua y vivienda. Ferriol justificó el rechazo porque no puede garantizar su cumplimiento, y quiso dejar claro que sí trabajan con este objetivo.

La comissió de Serveis a la Ciutadania aprobó el proyecto de reglamento de prestaciones económicas, con el rechazo del PSOE. También se aprobó, con el rechazo de socialistas y ecosoberanistas, el reglamento de los centros municipales de servicios sociales. Abraham recriminó que «el único objetivo del equipo de gobierno es desmantelar los servicios sociales»; argumentó que la Reforma Local y el plan estratégico de Cort van en este sentido. Ferriol lo negó y reiteró que se ha comprometido a mantener las mismas prestaciones de servicios sociales hasta el 31 de diciembre de 2015.