PALMA - VISTA AEREA DE PALMA . MAS FOTOS EN EL DISCO DEL DIA 10-9-2004 | Teresa Ayuga

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Balears deja atrás la recesión económica: uno de los indicadores claros para medir la temperatura de la economía, la recaudación de impuestos, ya ha comenzado a dar síntomas positivos tras años de caídas y el año pasado el Govern ya ingresó un 20 por ciento más que el anterior.

El comportamiento de todos los impuestos no fue igual, pero el dato más positivo de todos lo da el relativo a la recaudación del impuesto de transmisiones patrimoniales. El Govern ingresó un 16,13 por ciento más que en 2012 gracias a este tributo y consiguió 234 millones de euros. El impuesto de transmisiones patrimoniales es el que se paga cuando se adquiere una vivienda de segunda mano y se considera uno de los indicadores más claros para medir la situación económica.

En 2013, el Govern subió este impuesto para las viviendas más caras, las que tienen un precio de venta superior a los 300.000 euros, pero lo mantuvo para el resto de las viviendas. Es decir, que el Ejecutivo ingresó más dinero, pero no fue debido a un aumento tributario.

Canon de aguas

No sucede lo mismo con el canon de aguas, que sí experimentó una importante subida en 2013. El aumento de los tipos impositivos, que provocó criticas enormes del sector hotelero, ha tenido efectos beneficiosos para el Govern y el año pasado el Ejecutivo recaudó 21 millones de euros más que el anterior. Otro tanto puede decirse del impuesto de patrimonio, un tributo al que el Ejecutivo de Bauzá se oponía de forma radical en un princiopio, pero que le ha reportado pingües ingresos: 42 millones.

La previsión para este año es que la línea de ascenso se mantenga o incluso aumente. Las perspectivas económicas son mejores que las del año pasado y el Govern confía en que alguno de los tributos que ha tenido un comportamiento más irregular, como el de actos jurídicos documentados, se active. El año pasado dejó de ingresar 7 millones de euros.

En total, el Govern recaudó con los impuestos propios o cedidos un total de 532 millones de euros frente a los 446 ingresados en 2012, año en que se notó mucho más la crisis.