Imagen de archivo de una operación contra la prostitución en Platja de Palma.

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El gobierno municipal está dispuesto a quitar de la ordenanza cívica la prohibición de la prostitución si se encuentra una alternativa que elimine los robos y la violencia que acompañan a la prostitución en la Platja de Palma. El borrador prevé sanciones para los clientes de la prostitución, mientras que las prostitutas serán multadas cuando se encuentren a menos de 200 metros de colegios, zonas infantiles y de afluencia de menores.

El teniente de alcalde de Turisme, Álvaro Gijón, explicó que las asociaciones relacionadas con la prostitución le han trasladado su preocupación por los efectos negativos que puede tener esta prohibición en las mujeres, ya que es su modo de vida. Gijón les respondió que en Platja de Palma la prostitución va acompañada de violencia y robos, lo que ocasiona muchos problemas en la zona, especialmente a los turistas.

El titular de Turisme reiteró la necesidad de resolver esta problemática, que incluso ocupa páginas de periódicos en cabeceras internacionales. Sin embargo, reconoció que en otras zonas de Palma, como la puerta de Sant Antoni, la prostitución no ocasiona problemas a los vecinos.

Consenso

El gobierno municipal tiene la intención de hacer cambios en el borrador del futuro texto normativo a cambio de conseguir el máximo acuerdo posible si se solicionan los problemas. No obstante, aclaró que «el consenso significa consenso con todos, no satisfacer a cada colectivo con su tema particular». El Ajuntament continuará la ronda de reuniones para explicar la ordenanza e incorporar aportaciones. Una de las reuniones será con las asociaciones relacionadas con la inmigración, donde abordarán temas como el de los gorrillas. Gijón precisó que la ordenanza no se aplicará de una forma estricta, por lo que donde no causen problemas a los ciudadanos no se actuará. Los mismo ocurrirá con otros asuntos, como la mendicidad. «El objetivo de la ordenanza cívica es «eliminar los problemas de los ciudadanos, no prohibir», resumió Gijón. En este sentido, destacó que el 092 recibió 16.500 llamadas en el año 2011 de ciudadanos quejándose de problemas como la prostitución, el trile, etc.