El patio de Can Olesa, uno de los más emblemáticos del casco histórico de Palma. | M. À. Cañellas

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Una céntrica notaría de Palma fue el escenario de la compraventa del emblemático 'casal' Can Olesa, situado en la calle Morey, un monumento histórico-artístico desde el año 1973. Con la operación de ayer, por un importe total de 6 millones de euros, se interrumpe la vinculación de la familia Oleza con el imponente edificio, la cual se ha mantenido desde que en el siglo XVII fue adquirido por Salvador d'Oleza i Sureda.

El nuevo propietario de Can Olesa es un empresario sueco, perteneciente a una familia aristocrática de este país nórdico, que figura numerosas sociedades e inversiones en distintos países europeos. La adquisición del 'casal' se ha canalizado por medio de una sociedad cuya sede está en Palma. A la firma de las correspondientes escrituras acudieron, en la mayoría de los casos, los representantes societarios, además de sus asesores jurídicos, así como Ángel Oleza, el último inquilino del inmueble, junto con otros familiares, para formalizar la venta.

Un monumento

Cabe señalar que Can Olesa es un monumento, circunstancia que supone su máxima protección. Además, en la declaración original de 1973 se incluye todo el mobiliario y decoración de las suntuosas salas de la planta noble del 'casal'. En el Consell de Mallorca está depositado todo el inventario que el nuevo propietario está obligado a conservar y del que destaca una habitación del siglo XVII con un arco ornamental con motivos florales y una cama con dosel.

Días atrás, la presidenta del Consell, Maria Salom, anunció que la institución no ejercería el derecho de tanteo y retracto de esta operación de compraventa de Can Olesa.

Respecto al futuro, distintas fuentes dan por segura la rehabilitación integral de Can Olesa, labor que se ha encargado a un conocido arquitecto mallorquín. Además, el 'casal' podría albergar buena parte de las obras de arte que pertenecen a la nueva propiedad, las cuales también podrían ser contempladas por el público visitante, como un atractivo turístico más de Palma.