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En Balears están regularizadas más de 132.000 plazas de turismo residencial, tras la entrada en vigor de la Ley del Turismo, en julio de 2012, y la reciente modificación habida este año en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). La legalización de estas plazas está dentro de la estrategia del Govern y Consells insulars (Menorca y Pitiuses) de regularizar toda la oferta de alojamiento vacacional para evitar el fraude fiscal y la competencia desleal a la oferta reglada.

«En el último un año se han reglado en Mallorca unas 1.700 viviendas vacacionales en Mallorca. Curiosamente, entre 1987 y 2012, es decir en 25 años, sólo se habían regularizado 2.800 viviendas vacacionales. Entendemos la importancia del turismo residencial para la economía de las Islas, de ahí que se han establecido los mecanismos para homologar esta oferta (fincas, chalets y pareados) para evitar la competencia desleal y el fraude fiscal», explica el director general de Turismo, Jaime Martínez.

Los consells de Eivissa, Formentera y Menorca también han hecho lo propio en el último año, habiéndose legalizado unas 600 viviendas en Eivissa y alrededor de 200 en Menorca.