Imagen de la fachada de la sede de Emaya. | SERGE CASES

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La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya) ha conseguido reducir su deuda en 14,7 millones de euros y ha logrado beneficios por 571.985,48 euros en 2012.

De esta manera, la deuda de la empresa municipal ha pasado de 47,6 a 32,9 millones de euros, según las cuentas anuales del ejercicio 2012, que han sido dadas a conocer hoy en el último consejo de administración de la empresa municipal, presidido por el teniente de alcalde de Medio ambiente y presidente de Emaya, Andrés Garau.

Según informa en una nota de prensa el Ayuntamiento de Palma, Emaya ha conseguido también reducir la deuda con los proveedores en 6,6 millones de euros.

La nota explica que los datos económicos son una demostración de lo que se consigue con la aplicación a Emaya de «los criterios de ahorro y eficiencia comunes a todas las áreas del Ayuntamiento de Palma, sumados a la voluntad de hacer más con menos recursos».

Por otra parte, el volumen de facturación por venta de agua cayó un 2,8 % respecto a 2011; así, el pasado año se facturaron 28,4 millones de metros cúbicos frente a los 29,2 millones de m3 del ejercicio anterior.

También se ha experimentado una reducción del 2,3 % en el volumen de agua residual depurada, que en 2012 alcanzó los 32,7 millones de metros cúbicos frente a los 33,5 millones de m3 del 2011.

Emaya dispensa el tratamiento de depuración en las aguas residuales de Palma y las provenientes de municipios de la parte foránea como Marratxí, Bunyola y Esporles, aclara el consistorio palmesano.

Finalmente, el volumen de residuos recogidos por Emaya en 2012 llegó a 226.896 toneladas, un 2,71 % inferior al registrado en 2011, cuando se recogieron 233.220 toneladas.