Josep Ignasi Aguiló, en un reciente debate celebrado en el Parlament sobre el déficit de la Comunitat. | Elena Valverde

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El Govern cerrará 2012 con un déficit que rondará el 1,7 por ciento según las estimaciones provisionales que maneja el equipo económico que dirige Josep Ignasi Aguiló, lo que implica que incumplirá la exigencia del Gobierno de acabar el año con un 1,5 por ciento. Ese era el objetivo marcado por el ministro Cristóbal Montoro y el Govern no lo cumplirá.

Ese déficit implica un gasto no presupuestado de más de 400 millones de euros. Dicho de otro modo, el Govern gastó en 2012 más de 400 millones de euros que no estaban en el Presupuesto que aprobó el Parlament.

Vicepresidència del Govern no ha cerrado definitivamente las cuentas que enviará a la supervisión de los hombres de negro de Montoro, pero el trabajo está prácticamente cerrado y la cifra definitiva se acerca al 1,7 por ciento.

Comunitat

El déficit presupuestario, el que no incluye las empresas públicas, está más cerca del 1 por ciento. Son las cuentas del sector público de la Comunitat y, especialmente del IB-Salut, las que han originado el desfase final en las cuentas, como ya sucedió el año pasado.

Superar el límite fijado por el Gobierno implica que el Govern se gastó el año pasado mas millones de los autorizados por el Ejecutivo. El equipo de Aguiló estima que cada décima de incremento de déficit representa un desfase cercano a los 25 millones. En este caso, dado que se ha superado en dos décimas, se calcula que el gasto extraordinario será de 50 millones más.

El Govern entregará las cuentas definitivas a final de mes, pero otras comunidades ya han adelantado sus previsiones del cierre del año. Madrid y Castilla-La Mancha ya han anunciado que cumplirán con el compromiso mientras que Catalunya ha comunicado lo contrario, es decir, que no tiene intenciones de cumplir el límite fijado por Madrid.