Josep Ignasi Aguiló. el pasado mes de diciembre durante el pleno sobre política autonómica celebrado en el Parlament. | Pere Bota

TW
105

El vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló, ha defendido hoy que el incremento de la presión fiscal a través de nuevos impuestos supondrá un incentivo para el crecimiento de la economía porque permitirá al Govern pagar sus deudas y contribuirá así a que fluya el crédito a las empresas privadas.

«Unos impuestos adecuados pueden permitir rebajar los tipos de interés» porque si el sector público obtiene recursos por esta vía ya no demandará tanta financiación privada, lo que facilitará que los bancos reduzcan sus riesgos y, en consecuencia, el precio al que prestan el dinero, ha explicado Aguiló.

A juicio de Aguiló, los impuestos que implantará su Govern no desincentivarán la generación de proyectos empresariales, que sí se ven afectados por el encarecimiento de los préstamos y la falta de financiación.

El vicepresidente, que ha hecho esta reflexión tras una rueda de prensa sobre los resultados de las iniciativas del ejecutivo autonómico en favor de los emprendedores, se ha reafirmado en la necesidad de mantener una política de austeridad en el gasto público.

De hecho, ha negado que, como han recogido los medios de comunicación, el Fondo Monetario Internacional (FMI) haya admitido que subestimó los efectos negativos de la austeridad sobre el empleo y la reactivación económica.

«Lo que ha dicho es que la coordinación de políticas es importante» y que «es necesario equilibrar las cuentas públicas para que se produzca una disminución de tipos de interés», ha aseverado Aguiló.

Según su criterio, la mejora en la eficiencia de los recursos públicos mediante la eliminación de «gastos superfluos», aunque estos sean en materias como la sanidad y la educación, ha de ser una «asignatura permanente».