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El vicepresidente de Economía, Promoción Empresarial y Ocupación, Josep Ignasi Aguiló, ha remarcado que el déficit de la comunidad en 2011 se sitúa en 3,8% sobre el PIB regional y ha subrayado que es tiempo de las acciones «de contundencia importante», dado que alcanzar los objetivos de déficit es «absolutamente irrenunciable».

Aguiló ha comentado que las cifras de déficit «no son buenas, pero tampoco una sorpresa», dado que se había contemplado también por parte del Govern un escenario más negativo al dibujado en julio por el anterior Gobierno del PSOE, y ha asegurado que los criterios de contención presupuestaria «funciona» en el archipiélago, puesto que sin ello el déficit podría haber ascendido a más del 5,5%.

Así lo ha detallado en Madrid momentos antes de participar en el Consejo Interterritorial de Internacionalización, órgano que congrega a los entes públicos y privados encargados de la promoción exterior empresarial.

Sobre la perspectiva para 2012, donde el límite vuelve a ser de 1,3%, el vicepresidente económico ha enfatizado que su departamento trabajará «día y noche» para poder ajustarse a los criterios fijados por el Gobierno central.

En este sentido, Aguiló ha aludido al despliegue de toda una serie de 'micromedidas' en diversos ámbitos de la administración pública, que en el caso de Baleares «todas están contempladas» dentro de un presupuesto «flexible», y la modificación de normativas de ámbito estatal coordinadas con cada ámbito institucional.

«Micromedidas que han de tomar los gerentes de cada empresa, de cada hospital, los directores de cada colegio e instituto. Por medidas dentro del ámbito de la comunidad autónoma y medidas de ámbito estatal», ha explicado el responsable del Govern en el área económica.

Aguiló volvió a comentar que la estimación de déficit del Govern es ligeramente inferior a la del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas (que lo marca en un 4% sobre el PIB regional) y reiteró que el déficit presupuestario es solo del 2,7% a lo que se unió diversos gastos no contemplados en presupuestos, principalmente facturas del Ib-Salut por valor de 200 millones.

Sobre el caso de las empresas públicas, el vicepresidente económico ha aclarado que se han estado «más o menos controladas» a consecuencia del ejercicio de austeridad emprendido en el último semestre. También ha dicho que el Ib-Salut ha realizado un esfuerzo «muy fuerte» de ajuste que ha repercutido en que el déficit sea más pequeño.

En este sentido, ha apostillado que, sin las medidas de ajuste del Govern, el déficit presupuestario hubiera sido del 4,2% (en lugar del 2,7% estimado actualmente) y que el general, incluido las facturas no contabilizadas, habría superado el 5,5%.