Cabecera de la manifestación que recorrió ayer diversas calles del centro de Palma. | M. À. Cañellas

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Algo menos de cuatro mil personas, diez mil según la organización, salieron ayer tarde a la calle en Palma para protestar contra «los recortes de las instituciones públicas de Balears», es decir contra el PP como se puso de manifiesto en sus lemas y consignas, cuando falta una semana justa para las elecciones generales.


Convocadas por el llamado Consell de la Societat Civil de Mallorca, que engloba a medio centenar de asociaciones, se manifestaron por el centro de la ciudad para expresar su descontento con las políticas del president Bauzá contra «los recortes» en materias muy diversas como la política lingüística, la educación, la sanidad, la política cultural, la los derechos laborales, o la igualdad.


La periodista Marisa Goñi, hasta hace unos meses directora de Televisió de Mallorca, la tele del Consell que el gobierno de María Salom ha decidido cerrar, leyó el manifiesto final. Un manifiesto, pactado por todas las organizaciones convocantes, en el que se apelaba «a la ciudadanía» como único modo para parar la actual situación de descontento.


Lemas variopintos


Aunque ningún partido político convocaba oficialmente, la presencia de cargos, candidatos y candidatas de los partidos de la izquierda fue abundante. De hecho, estaban ahí los principales cabezas de lista al Congreso: Pablo Martín (PSOE), Miquel Ensenyat (PSM-IV-Entesa-Equo) o Alejandro Aparicio (EU) . La representación socialista fue especialmente destacada. La ex presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol o la ex alcaldesa de Palma, Aina Calvo se manifestaron junto a más ‘ex' de sus respectivos gobiernos. Aunque, el PP no aparecía citado expresamente en el manifiesto, estaba claro quien era el destinatario de la protesta que muchos partidos tomaron como un acto más de la campaña. De hecho, durante la marcha se repartió propaganda para las elecciones.


Hubo crítica política, pero también lemas y propuestas imaginativas. Un grupo de ‘dimonis' y otro de ‘tamborers' puso ritmo a la marcha que salió de la Plaça d'Espanya y concluyó en es Born , que fue donde se leyó el manifiesto.


Dirigentes de los sindicatos, feministas, representantes de colectivos de la cultura y de los movimientos sociales marcharon tranquilamente para expresar su rechazo a los recortes. Hubo alguna bandera republicana y los lemas fueron los clásicos pero también se improvisaron nuevos.