TW
1

El vicepresidente económico, de promoción empresarial y ocupación, Pep Ignasi Aguiló, ha emitido una orden al resto de Consellerias para que fijen con «precisión» la definición de los objetivos de sus gastos, con el fin de establecer prioridades a la hora de asignar los recursos públicos durante la elaboración de la Ley de Presupuestos para 2012.

Así, Aguiló ha publicado en el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB) una orden por la cual se dictan las normas para la elaboración de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el próximo año en la que señala que las políticas de gasto deben ser «objeto de revisión y de un análisis riguroso».

El conseller explica que ante el actual escenario económico de «reajuste», la Administración está «obligada más que nunca a garantizar los recursos suficientes para atender las necesidades básicas de los colectivos más desfavorecidos», por lo que remarca que esta situación «obliga a los gestores públicos a enfatizar el cumplimiento de los principios de prudencia financiera, de transparencia y de eficiencia en la gestión y en la asignación de recursos».

Por este motivo, Aguiló subraya que para cada uno de los objetivos y de las actividades propuestas por las Consellerias, deben ser «precisadas, cuantificables y consecuentes y tanto unos como otros se deben definir en términos que permitan valorar el nivel de los resultados obtenidos».

«En cualquier caso, las actuaciones dirigidas a mejorar o, al menos, mantener la prestación de los servicios públicos esenciales, como ahora la asistencia sanitaria, la educación y la protección social, son los ejes estratégicos básicos de la política presupuestaria del Govern», recalca.

Asimismo, añade que las dotaciones presupuestarias reflejadas en la clasificación funcional y por programas, en los cuales se concreten los objetivos que se deben lograr, se deben «ajustar a las directrices de crecimiento/limitación del gasto que, oportunamente y a lo largo del proceso de elaboración, debe impartir la Vicepresidencia Económica, de acuerdo con las previsiones económicas y la disponibilidad de recursos y en función de los escenarios presupuestarios correspondientes; del modelo de financiación autonómico y de los compromisos adquiridos en ejercicios anteriores».

Aguiló enmarca la citada Orden en el hecho de que durante los últimos ejercicios, la Comunidad Autónoma ha mostrado «notables desequilibrios en sus finanzas, debidos, por una parte, a una profunda crisis económica que provocó reducciones considerables de los ingresos y, por otra, a un incremento del gasto que obvió de forma reiterada la realidad del momento».

Así, apunta que esta situación se traduce en unos niveles de déficit público que «superaron ampliamente el 3 por ciento del PIB de Baleares desde el año 2008, llegando a cifras del 4 por ciento en 2010».

«GRAVES PROBLEMAS DE TESORERIA»

Al mismo tiempo, el vicepresidente económico agrega que durante los periodos citados, se incrementaron de forma «muy significativa» los niveles de endeudamiento, sin que estos aumentos fuesen, por lo que se refiere al ejercicio 2010, «suficientes para financiar el déficit, lo que ha generado graves problemas de tesorería que han afectado muy especialmente al ejercicio 2011».

En consecuencia, Aguiló subraya que la política presupuestaria para el año 2012 se ve «condicionada» por «desequilibrios generados durante ejercicios anteriores y, a la vez, por una coyuntura económica, que si bien muestra ciertos signos de recuperación, no permite todavía prever un incremento significativo por lo que hace referencia a los ingresos».

Por otro lado, destaca que las exigencias de equilibrio presupuestario emanadas desde el ECOFIN; la Comisión Europea; el Consejo de Política Fiscal y Financiera y el Ministerio de Economía y Hacienda, con el objetivo de «garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas, provocan que se tengan que plantear ajustes presupuestarios que permitan a Baleares el cumplimiento de los objetivos del déficit».