Rubalcaba saluda afectuosamente a Antich durante el mitin que los socialistas celebraron en Palma en abril. Foto:EFE | Efe

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La dirección federal del PSOE ha hecho saber a todos los 'barones' territoriales, incluido Antich, que no es momento de 'tirar la toalla' ni de adelantar el proceso ordinario de congresos que está previsto para después de las elecciones generales con independencia de que se anticipen o no.

El Consell Polític del PSIB, máximo órgano del partido entre congresos, se reúne este viernes para analizar las consecuencias de la debacle electoral y para tomar las decisiones más inmediatas, entre ellas si el president en funciones del Govern y diputado electo por Mallorca, Francesc Antich, toma posesión de su escaño y da la réplica a Bauzá en el debate de investidura o hace como Matas en 2007 y se va.

¿Antich candidato?

Antich no ha comunicado su decisión ni siquiera a Francina Armengol, que se encargaría de la réplica y asumiría el liderazgo de la oposición. En realidad, lo que preferirían Zapatero, Rubalcaba y Blanco es que Antich tomara posesión de su escaño en un primer momento y que continuara como secretario general hasta el congreso ordinario en que podría dar el relevo a Francina Armengol, que forma parte de la Ejecutiva federal y que apoya totalmente a Rubalcaba como candidato a la presidencia del Gobierno en las generales. Hay quien plantea en el entorno 'armengolista' que Antich podría ser, incluso, candidato para las generales, bien al Congreso o al Senado. Desde el entorno de Antich, sin embargo, cuesta imaginar al aún presidente en funciones afrontando una nueva campaña electoral, si bien se insiste en que «es imprevisible». Otras fuentes argumentan que ésa podría ser la «salida por la puerta grande» que le diferenciaría de Matas. Estos días manejan otros posibles nombres pero no dejan de ser «ejercicios de política ficción o divertimentos periodísticos», según fuentes de la actual dirección. En el caso de que Francina Armengol dirigiera el grupo parlamentario, Antoni Alemany podría asumir en un primer momento el liderazgo de la oposición en el Consell.