Una de las dos nuevas vías cubiertas con capacidad para estacionar un convoy de 51 metros de longitud. | M. À. Cañellas

TW
0

Los talleres de Son Rullan han experimentado una importante transformación en los últimos seis meses. Los diversos proyectos que se ejecutan han cambiado la fisonomía tanto del área destinada a los trabajadores y a los talleres como las oficinas centrales de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM).

Y es que durante los últimos meses se han ejecutado en esta zona hasta cinco proyectos diferentes. En primer lugar, se ha ejecutado la ampliación de los talleres con dos nuevas vías cubiertas electrificadas que se destinarán al mantenimiento de los trenes del metro, que han costado cuatro millones de euros. Hasta la fecha los trabajos de conservación de estos trenes eléctricos se realizaba en la estación intermodal de Palma que contaba con un foso para la realización de estas labores. Esta nueva área se ha dotado de vías, plataformas o sistemas para desconectar la catenaria. También se ha dotado a los talleres existentes con un nuevo torno de foso para perfilar las ruedas del tren. Asimismo se ha instalado un túnel de lavado.

Igualmente, se llevan a cabo mejoras en el edificio pegado a los talleres destinado a los servicios del personal (vestuarios, baños...) y a almacenes. «Estas instalaciones no estaban adecuadas a las necesidades actuales», explica Bartomeu Darder, gerente de Serveis Ferroviaris. El presupuesto de esta obra ha sido de 1,4 millones de euros.

En la zona de la playa de vías, también se están ejecutando actuaciones de seguridad. Éstas consisten en el cambio de agujas. Antes este proceso se realizaba de forma manual, ahora el cambio se ha mecanizado y el cambio está centralizados en la estación intermodal. Esta obra ha tenido un coste de 690.000 euros.

Además, se ha remodelado el edificio central de las oficinas de Serveis Ferroviaris, cuyas instalaciones se han ampliado considerablemente. Esta actuación ha tenido un coste de un millón de euros.

Finalmente, en Son Rullan, se desarrolla la electrificación de las vías. Y es que electrificación primero de la línea Palma-Inca hace necesario el cambio de las instalaciones para adecuarlos a los trenes eléctricos, que comenzarán a funcionar en abril o mayo.

«Las obras han sido complicadas porque han trabajado cuatro empresas simultáneamente y con el tren en servicio», indica el gerente de SFM, quien precisa que además ha habido problemas en el suministro de material específico ferroviario lo que ha retrasado la ejecución. En cualquier caso, las obras estarán concluidas a final de mes y «ya se podrán comenzar a hacer las reparaciones del metro en las nuevas instalaciones».