«Cuando se licita Son Espases se crea una cláusula para un porcentaje destinado al Plan de Comunicación, que debía pagar la concesionaria. Eran tres fases, por valor de 1,3 millones. Y nosotros interpretamos que no era necesario sacarlo a concurso. Desde la Conselleria, y es una decisión mía, se encargan los trabajos de publicidad a Over Marketing. La presión mediática era brutal y esa empresa era buena y apropiada», señaló.
Los motivos que hacían a Over idónea son, para Aina Castillo, varios: «Era una empresa de fuera y no estaba contagiada por toda la polémica que rodeaba a la construcción del nuevo hospital. Además, necesitábamos a profesionales serios porque se trataba de una campaña de publicidad muy complicada. Over reunía esos requisitos». Los meses pasan y la empresa de publicidad lleva a cabo una campaña «en vallas publicitarias, medios de comunicación y otros trabajos».
Cumplido ese plazo, según Castillo, «Over quiere cobrar los 673.000 euros y la concesionaria consulta con la Conselleria. Nuestra intención era fiscalizar esos trabajos, para comprobar que todo había salido correctamente, y como no nos da tiempo no autorizamos el pago. Luego cambia el Gobierno autonómico y el que finalmente autoriza el pago a Over es la Conselleria de Salut del ejecutivo de Antich».
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O sea que adjudica fraccionando contratos a la trama Gurtel, y el muerto se lo echa al que viene detras. Increible manera de la lavarse las manos. Los ciudadanos no somos tontos