Y con la vista ya puesta en el próximo curso, se puede afirmar con certeza que las dificultades económicas serán, un año más, un hándicap para el desarrollo de los planes previstos por el actual equipo rectoral. Al recorte del presupuesto en un 4,4% en 2010, se sumará el que pueda darse de cara a 2011, cuando lo que necesita la UIB es precisamente lo contrario, un incremento importante de la aportacón del Govern para resolver, sobre todo, la falta de espacio.
Por ello, la UIB ya asume que infraestructuras caducas, como el Aulario, un edificio de aulas prefabricadas, con más de 12 años de existencia y serios problemas, tendrá que utilizarse un curso más, pese a que la rectora, Montserrat Casas, ya advirtió a finales del año pasado que era «urgente» su eliminacion para ceder este espacio a un edificio de posgrado. Pero esta nueva infraestructura deberá seguir esperando hasta que haya dinero suficiente.
El vicerrector de Estudiantes, Cels García, confirmó que, al menos, sí será posible la ampliación del edificio Interdepartamental II, otra de las urgencias marcadas por la rectora, y destinado a los estudios de Enfermería y Fisioterapia.
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