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La secretaria de Organización del PSOE balear, Rosamaria Alberdi, ha asegurado hoy que es «una vergüenza» que el PP no aclare las sospechas de financiación ilegal de este partido que se detallan en la acusación de la fiscalía contra el ex presidente Jaume Matas en el «caso Palma Arena».

Tras fijar hoy el juez instructor una fianza de tres millones de euros contra el antiguo presidente balear y ex ministro de Medio Ambiente por varios presuntos delitos de corrupción, Alberdi se ha declarado «escandalizada» y ha recordado que el «caso Palma Arena» es uno de los muchos que afectan a los populares de Baleares.

«Me espeluzna de verdad pensar que este señor podría estar gobernando esta comunidad autónoma», ha incidido la dirigente socialista, para quien también es vergonzoso que el PP no expulsara «inmediatamente» a Matas cuando se supo que había confesado delitos fiscales.

Para Alberdi, es preciso que el PP asuma sus responsabilidades respecto a los indicios de que la «trama organizada» encabezada por Matas «no sólo era para el enriquecimiento ilícito de las personas que estaban ocupando lugares de poder y de gobierno en aquel momento, que eran todas del PP», sino que también podría haber financiado ilegalmente el partido.

«Se deben dar explicaciones y se deben dar inmediatamente», ha recalcado Alberdi, para quien la renovación de la que presume el PP es una mentira a la ciudadanía porque el partido que ahora preside José Ramón Bauzá «no ha rendido cuentas» sobre la financiación de gastos de su campaña de 2007 con fondos públicos.

Ha recordado a este respecto que «diez diputados del PP» eran consellers del Govern de Matas, y ha comentado que «cambiar las caras es muy fácil», pero lo necesario es que el partido asuma su responsabilidad como organización.

Respecto a que el PP rechace sus críticas por los casos de corrupción que afectaron en el pasado al PSOE, ha afirmado que no son los socialistas, sino la ciudadanía, quien «le pide honradez y gobernar como se tiene que gobernar, y no enriquecerse ilegalmente».

«Estoy hablando como representante de muchas personas que están espantadas, alarmadas, escandalizadas moralmente», ha dicho la dirigente socialista, para quien «al PP no lo persigue la Justicia, lo persigue su historia y su comportamiento».