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El promotor de la plataforma cívica por la ejemplaridad en la vida política, el ex conseller d'Hisenda Alejandro Forcades, comparó ayer a Jaume Matas con «un hijo» que tuviese «algún problema» y afirmó que, en modo alguno, se arrepentía de haberlo fichado como director general a finales de los ochenta.
Forcades, mentor político del ex president, que le sucedió como conseller d'Hisenda, dijo sentirse «triste pero resiliente» ante la situación de Matas. La 'resiliencia' alude en psicología a la capacidad de reponerse de la adversidad para seguir adelante.
Forcades, reacio en un primer momento a opinar sobre el president Matas para no dejar en un segundo plano el motivo de su reunión, ayer con el president Antich (trasladarle las propuestas de a plataforma por la ejemplaridad en la vida política) , terminó revelando que hace unos días le llamó a su teléfono móvil, que no le contestó y que, «aún sabiendo que estaba pinchado», le dejó un mensaje. «Le pregunté cómo estaba, le dije que esperaba que se defendiera de la forma más inteligentemente posible y que rezaba por él», comentó el ex conseller, que ahora preside el Cercle d'Economía.
Más transparencia
Forcades, acompañado por otros representantes de la plataforma, consideró que, a la larga, una situación como la que se ha vivido en Balears por casos de corrupción, que tildó de «caótica» debería servir a la clase política para promover un cambio radical a favor de la transparencia en la gestión pública y que, para eso, estaba ahí la plataforma.