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«Le quise hacer un favor a Jaume Matas», aseguró ayer el ex presidente de Gesa e imputado en el 'caso Palma Arena', Bartomeu Reus, en su declaración de ayer para aclarar su vinculación con el piso de Madrid que los investigadores atribuyen al ex president del Govern.
Reus reiteró en el interrogatorio al que fue sometido ayer por espacio de dos horas, y en el que se negó a responder a las preguntas de la abogada del Govern, Maria Àngeles Berrocal, que él es el propietario del inmueble situado en la calle madrileña de Ramón de la Cruz y ratificó las explicaciones dadas el día anterior por Fernando Areal, cuñado de Matas.
Victoria
Reus explicó que tras la victoria electoral de 2003 «Matas no tenía capacidad para hacer frente a la hipoteca del inmueble y me ofreció la posibilidad de adquirirlo y el pasar a ser el inquilino. Acepté por razones de amistad y por la oportunidad de negocio que significaba comprar un piso de lujo».
El ex presidente de Gesa confirmó ante el juez del 'caso Palma Arena' que «Fernando Areal hizo todas las gestiones para la compra del piso» y explicó que transfirió al cuñado de Matas los 100.000 euros que había abonado como paga y señal a Sacyr-Vallehermoso. Reus aportó una copia de la transferencia a un cuenta de Bancaja.
El abogado de Reus, Antoni Albertí, destacó que «el piso es suyo y está al corriente de todos los pagos», añadiendo que «ha aportado todos los documentos». El defensor enfatizó que «mi cliente ha quedado en libertad sin medidas cautelares».