TW
0

Esquerra Unida (EU) levantó ayer el pie del acelerador en su camino a la salida del Govern y, para evitar un conflicto con el resto de partidos del Bloc y Eivissa pel Canvi, y decidió esperar «un poco más» a que el president destituya al conseller Nadal y a que «UM se regenere».

El Consell Polític de EU, que se reunió en un ambiente de cierta tensión y división de opiniones, acordó pedir la dimisión de (no por su imputación en el 'caso Can Domenge' sino «por el clientelismo y la corrupción que han formado parte de la manera de actuar» de su partido) y el relevo de «todos sus representantes imputados en casos de corrupción». Caso de no ser así, y según la resolución de EU, «se tiene que contemplar la posibilidad de un gobierno en minoría en las diferentes instituciones».

Esquerra Unida quiere reunirse con el PSM y el resto de partidos del Bloc para actuar conjuntamente y también con el president Antich para comunicarle que, de no hacer nada con los imputados, «deberá elegir entre UM y el Bloc».

David Abril, coordinador de EU, dio cuenta de la reunión acompañado de sus principales cargos de las instituciones (Eberhard Grosske y Fina Santiago entre otros) y explicó que a partir de ahora, y hasta que Antich decida o UM se vaya, se dedicarán a «incomodar» y hacerse notar. David Abril, por ejemplo, no descartó que voten de forma diferente a UM en todo aquello que se salga del pacto y apuntó a una estrategia de movilización en contra de la corrupción y de las prácticas de UM, Abril consideró muy factible que se llegue a convocar una manifestación. De momento, nadie deja los cargos.