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Podríamos decir que son los primeros escolares de la iniciativa «A es Carnatge en bicicleta». Quince estudiantes de primero y segundo de Bachiller del Institut Antoni Maura de Palma en colaboración con la Conselleria de Medi Ambient dedicaron cerca de cuatro horas a conocer, estudiar y disfrutar la zona protegida de es Carnatge. Para ello, a las 10 de la mañana esperaron la llegada del furgón que transportaba las bicicletas, aportadas por la Fundació per al desenvolupament Sostenible de les Illes Balears, para realizar el interesante recorrido. Pero, además de conocer parte de nuestro entorno medioambiental, parecía haber otro mensaje de concienciación, o como aseguraba el profesor de Biología Pere Crespí, «hacer una crítica al ciudadano de Palma para... .-o mejor, rectifica Crespí- cambiar y concienciar a la gente sobre el carril bici. Hay que dejar el coche y utilizar la bicicleta, que es un medio no contaminante». Aparte de dicha opinión, bastante crítica, la primera explicación a los escolares fue sobre la Seu. La segunda parada se realizó frente a la escultura, realizada por Remigia Caubet, «Nuredduna», donde los chicos y chicas aprovecharon para tomar un refrigerio y coger fuerzas, pues en el primer tramo una alumna ya había caído en dos ocasiones. Bien por motivos técnicos de la bicicleta o por falta de práctica, lo cierto es que la chica no quiso continuar el recorrido. De allí pusieron rumbo a es Portitxol, las playas de Ciudad Jardín, el Peñón y Cala Gamba, siempre por el carril bici. El principal objetivo fue profundizar en las «riquezas» de es Carnatge. Fósiles, niveles del mar, vegetación, etc, donde los jóvenes pudieron visitar y especialmente conocer la zona protegida. En definitiva, una entretenida y amena clase de biología, en el entorno más natural.

Juliá Aguirre

(texto y fotos)