TW
0

«Los costes laborales españoles son un 15 por ciento más elevados que la media europea y entre un 23 o un 25 por ciento más altos que Alemania; para ser competitivos, los salarios deberían bajar un 15 por ciento», afirmó ayer Francisco Navarro, vicedecano del Instituto de Empresa, en la conferencia inaugural del V Programa Avanzado de Dirección General que organizan la Confederació d´Associacions Empresarials de Balears (CAEB), la Cámara de Comercio y Sa Nostra Caixa de Balears.

Navarro afirmó que la economía española tiene un problema de productividad, medida en términos de capacidad de producción en función de los costes, y una necesidad de incrementar su competitividad, entendida como la capacidad de renovar su portafolio de productos y servicios en función de los cambios en el entorno internacional.

Más formación
El vicedecano del Instituto de Empresa afirmó que las mejoras de competitividad «no se improvisan» sino que requieren de mejoras en el sistema educativo y de formación, así como de fomento de la investigación, el desarrollo y la innovación. «Es necesario un ajuste salarial, mejoras en el sistema educativo y de formación», afirmó el ponente tras la inauguración del Programa Avanzado de Dirección General, un acto al que asistieron los presidentes de la CAEB, Josep Oliver, de la Cámara de Comercio, Joan Gual de Torrella, y de Sa Nostra Caixa de Balears, Fernando Alzamora.

En su exposición, el vicedecano del Instituto de Empresa indicó que, en estos momentos, «el principal problema que tenemos es el del valor añadido, porque los crecimientos que tuvimos en los últimos seis o siete años no van a volver», en referencia al 'boom inmobiliario. A su juicio, «las vacas flacas han llegado y tenemos un exceso del 50 por ciento de la capacidad (productiva) instalada», por lo que pronosticó que vienen «tiempos de niveles de paro muy duros» y un proceso de «gran empobrecimiento de España», según afirmó.

A nivel del sector público, el también profesor de Contabilidad de Costes y Control de Gestión del IESE consideró necesario reducir el endeudamiento y el déficit público, así como desarrollar un cambio de modelo económico que, a su juicio, «requerirá de muchos años» y que, reiteró, generará una situación de «empobrecimiento franco» del país.

Navarro afirmó además que España cuenta con una estructura político administrativa «carísima» y a su juicio poco eficiente, en el que el Gobierno central acomete el 40 por ciento del gasto público y las comunidades autónomas el 60 por ciento restante.

A nivel microeconómico, el vicedecano del IESE recomendó a las empresas acometer una «drástica» reducción de costes, buscar nuevas fuentes de financiación, diversificar su oferta de productos y servicios y posicionarse en los mercados internacionales.

En cuanto a la internacionalización y a nivel global, Navarro consideró que el hecho de que la Unión Europea sea un «conglomerado» de Estados no beneficiará a sus empresas en comparación con las estadounidenses o las chinas.