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Un 17'14 por ciento de los titulares de tarjetas sanitarias (TS) del Servei Balear de Salut (IB-Salut) son extranjeros con un total de 176.021 residentes extranjeros con derecho a recibir asistencia sanitaria en los hospitales y centros de salud públicos de las Islas.

De los 176.021 extranjeros con tarjeta sanitaria, 147.218 tienen recursos y los 28.803 restantes son personas sin recursos, pero que también tienen derecho a recibir asistencia sanitaria gratuita.

Las Islas superan, según los datos facilitados por el Servei Balear de Salut (IB-Salut) de la Conselleria de Salut i Consum, a 31 de julio, el millón de tarjetas por cuarto año consecutivo, con un total de 1.026.853 tarjetas sanitarias registradas en Balears.

Por Islas, Mallorca cuenta con 810.121 usuarios de la sanidad pública balear; 86.667 en Menorca y 130.065 en Eivissa y Formentera.

Hay que recordar que en 2008 se llevaron a cabo dos depuraciones del registro de tarjetas sanitarias tras cotejar los datos con Andalucía y Valencia , al incorporarse ambas comunidades autónomas al sistema unificado de registros que mantiene el Ministerio de Sanidad, por lo que, tras las dos operaciones de depuración se procedió a dar de baja del sistema balear de salud a las personas con doble tarjeta.

Un dato importante a tener en cuenta, tal y como explican desde Atenció Primària de Mallorca, es que los ciudadanos tienen que presentar la tarjeta sanitaria siempre que se acude a un hospital o un centro de salud público, porque es la herramienta que sirve para identificar a los pacientes, acceder a la historia clínica y a la receta electrónica.

Médicos
La Conselleria de Salut i Consum ha hecho un esfuerzo importante para rebajar el número de tarjetas que atiende cada médico, con la intención de mejorar la atención a los usuarios de la sanidad pública. De hecho el número global de tarjetas se ha rebajado desde 2007 a 2009 en un 10'75 por ciento, -202.

Desde la Conselleria de Salut i Consum aseguran que la Atención Primaria es la que más valoran los ciudadanos, y por ello la principal apuesta del departamento que dirige Vicenç Thomàs es aumentar la calidad asistencial, más tiempo para que los facultativos atiendan a los pacientes y menor carga para los profesionales sanitarios.

En 2007 los médicos de las Islas atendían una media de 1.879 tarjetas sanitarias, mientras que en 2009 se ha rebajado hasta las 1.777 tarjetas sanitarias atendidas por cada facultativo.

La tarjeta sanitaria es el documento que utilizan los ciudadanos de las Islas para poder acceder a la red sanitaria pública. No todos los residentes tienen derecho a disponer de la tarjeta. Es necesario cumplir una serie de requisitos, entre otros estar afiliado a la Seguridad Social. Sólo los menores, las mujeres embarazadas y los que demuestran situación de pobreza pueden disponer de ella aunque no estén afiliados y cotizando a la Seguridad Social. También se atiende a las personas sin recursos.