Los cinco refugios que el Consell de Mallorca tiene en la Serra de Tramuntana aparcaron en 2008 la crisis y mantuvieron sus tasas de ocupación. Sin embargo, la desaceleración económica sí dejó su huella a través del descenso en el número de comidas que se sirvieron, que en algunos casos cayeron en un 35 por ciento.
Sólo el refugio de Muleta vio cómo sus usuarios descendían a lo largo del año pasado, pasando de 2.419 personas alojadas a 2.269, lo que supuso una disminución del 6'2 por ciento. El de Tossals Verds mantuvo sus cifras (2.518 personas durmieron en el refugio en 2007 y otras 2.571 en 2008), mientras que los alojamientos en el de Can Boi aumentaron en un 6'9 por ciento (de 2.352 a 2.515).
A pesar de que la tasa de ocupación en los albergues que el Departament de Medi Ambient del Consell gestiona en la Serra se mantuvo, el número de almuerzos descendió de forma considerable. Así, en el albergue de Muleta se contabilizó una bajada de un 29 por ciento, ya que en 2007 se sirvieron 2.831 comidas y, en 2008, 1.988. En el de Can Boi, la cifra también descendió en un 29 por ciento, pasando de los 1.149 almuerzos de 2007 a los 812 del año pasado.
Sin embargo, quien más padeció la bajada fue el refugio Tossals Verds, con 1.110 comidas menos en un año, lo que supuso un descenso del 35 por ciento. En 2007, el establecimiento dispensó 3.188 comidas y en 2008, 2.078. Si se compara la dinámica de los últimos cinco años, la disminución ha sido mayor, cayendo los almuerzos en ese periodo de tiempo en un 54 por ciento.
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