C. Ruiz de Galarretapalma01/07/09 0:00
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Dos años de legislatura y dos movilizaciones de la plantilla de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM). El malestar de los trabajadores con la empresa se traducirá de nuevo en una huelga que paralizará en el servicio del tren y metro a partir de hoy afectando a unos 1.000 usuarios, y durante cinco días de julio, a unas horas determinadas. Hoy, miércoles, y el próximo martes, día 7, pararán de 10 a 12 horas. El lunes 20 la huelga se prolongará durante todo el día. El viernes 24, el paro será por la tarde noche, de 20 a 22 horas y, finalmente, el sábado 25, de las 14 a las 16 horas.

En esta ocasión, las reivindicaciones de los trabajadores se centran básicamente en la exigencia de más medidas de seguridad de los trenes y menos subcontratas para el mantenimiento de los ferrocarriles. A juicio de los trabajadores, «los trenes diesel no son seguros. La empresa subcontratada ha descuidado las revisiones y, por eso, han aumentado las averías (ayer hubo tres) y nos tememos que hará más. Los trenes no están bien; son un peligro». En este sentido, piden la eliminación inmediata de de subcontratas, que la plantilla de los talleres se incremente con personal fijo de SFM. La empresa reconoce que es imposible eliminar las subcontratas externas. También piden que SFM salga del convenio y que asuma el tranvía, reivindicaciones políticas para la empresa.

Ayer, en una reunión que se prolongó durante cuatro horas, no fue posible llegar a un acuerdo para evitar los paros, y los ánimos estaban bastante caldeados. Alejandro Hoyas, presidente del comité de empresa, dijo al finalizar la misma que no aceptaban propuestas a largo plazo, ni que se intentará negociar en el último momento una cuestión de envergadura. Los trabajadores piden además cambiar de interlocutores. Bartomeu Amengual, cogerente de SFM, fue contundente: «No quieren seguir negociando. Han estado pasteleando todo el tiempo. Hemos tenido seis reuniones internas y cada vez las reivindicaciones son diferentes». Gual pidió disculpas a los usuarios por las molestias.

Los servicios mínimos en las dos horas de paro prevén un tren a Inca cada media hora, uno a sa Pobla, otro a Manacor y en el metro uno cada 45 minutos.