Unos 200 trabajadores de la base de Spanair en Palma se manifestaron ayer para protestar por los traslados. Foto: SEBASTIÀ AMENGUAL

TW
0

Los trabajadores de la base de Spanair en Palma, que ayer se concentraron frente a la sede de la compañía en Son Sant Joan, afirman que la política de traslados que quiere ejecutar la nueva propiedad de la aerolínea, de capital catalán, «es una estrategia de culminar todo un proceso de despidos encubiertos, porque ya saben que el 80% de los trabajadores se niegan a ser trasladados a Barcelona», afirmó ayer la presidenta del comité de empresa de Spanair en Palma, Eva María Marín.

Tanto CC.OO, UGT como USO critican abiertamente la «dejadez» y falta de «voluntad política» del Govern, «porque no ha hecho todo lo que tenía que hacer, por lo que nos sentimos indefensos», afirman los sindicatos.

El representante de USO, Jordi Mauri, por su parte, dejó claro que «es muy posible que los trabajadores de Palma se planteen realizar paros y hacer huelga para evitar los traslados, porque son una forma encubierta de abaratar los despidos de los trabajadores de Palma».

Los manifestantes han mostrado pancartas con los lemas «20 años de sacrificio para quedarnos sin oficio», «El traslado es una decisión política, no económica», «Estos catalanes no nos quieren en sus planes», «Somos mileuristas no futbolistas». Sin embargo, la concentración puso de manifiesto la división sindical existente, de ahí las dos pancartas diferentes que encabezaban la manifiestación, una compartida entre CCOO y UGT, mientras que la otra la portaban representantes de USO.

La empresa comunicará en las próximas semanas cuáles son sus intenciones sobre los traslados y a cuántos trabajadores afectará, aunque los sindicatos consideran que el objetivo es lograr que de los 700 trabajadores que hay actualmente en la base de Palma, sólo queden operativos algo menos de 250.