González y López Aguilar, en el centro, acompañados de Antich, Ramis, Armengol y Riera, anoche en el mítin. Foto: SEBASTIÀ AMENGUAL

TW
0

El PSOE balear reunió ayer a unas 3.000 personas, casi 4.000 según algunas fuentes del partido, en el mitin central de la campaña electoral para las europeas y que se celebró en Inca. El ex presidente de Gobierno, Felipe González (más que su cabeza de lista, Juan José López Aguilar) fue la estrella central del mitin, en el que también intervino Francina Armengol y el Francesc Antich.

El president del Govern adoptó ese tono que tan bien se le da en sus mítines y bromeó con una pregunta que, recientemente, le hizo Rosa Estaràs en el Parlament. «Me preguntó 'Quo Vadis Antich', que quiere decir dónde vas, Antich. Y resulta que la que se va es ella, igual que se fue Jaume Matas».

Pero la gente a quien había acudido escuchar era, principalmente a Felipe González.

El ex presidente se presentó como un europeista convencido, destacó la importancia que tiene Europa y fue critico con el capitalismo sin control. Abogó por que la Unión Europea establezca un control sobre los bancos y dijo que «el sistema económico ha funcionado como un casino global sin reglas». González, se mostró un defensor absoluto del sistema público de pensiones. Reclamó una política común para la inmigración y encandiló al auditorio (donde había amplia presencia de inmigrantes) recordando como durante años «fuimos nosotros los emigrantes»».

González incidió en que la crisis era mundial, no española, y afirmó que el PP había sido el único partido que no parecía alegrarse con el descenso de las listas del paro. Fue crítico con Aznar y con el modo en que «nos alejó de Europa». Recordó como la abstención en las europeas comenzó a crecer cuando los socialistas dejaron el Gobierno.

Ese fue también el eje de la intervención de López Aguilar. Dijo que el PP «se ha relamido» en los últimos meses con los datos del paro y ha utilizando a los desempleados como «munición en su asalto al poder y en su hambre atrasada de Moncloa».

El candidato abogó por «enseñarles a leer democráticamente» al Partido Popular y aseveró que desde el PSOE, en este sentido, se marca «la diferencia» y se va «en la buena dirección». En opinión del aspirante socialista, el PP se ha dedicado a la «depredación medioambiental y al desprecio por el débil, llenándose la boca de España y de las familias», a quienes, lamentó, «humilló cuando se produjo la tragedia del Yak-42».

En este sentido, enfatizó que los 'populares' habitan «en una España que está en el pasado» e incidió en que proteger a la familia «es promocionar el trabajo desde la igualdad, que las mujeres puedan alcanzar la igualdad de oportunidades, abogar por la conciliación y el igual reparto de las tareas, multiplicar las becas y duplicar el presupuesto de la educación, que son derechos de la ciudadano».

Por el contrario, dijo, el PP basa su receta en «ponerse al lado de los especuladores y en jalear a los trabajadores contra Zapatero, porque todo el mundo recuerda que el partido congeló el sueldo de los trabajadores y el PP se fumó un puro, y redujo las prestaciones en tiempos de bonanza».

Mañana viernes concluye la campaña electoral. El sábado es «jornada de reflexión».