TW
0
SEBASTIANA CARBONELL Los pueblos costeros y Es Raiguer, continúan siendo las zonas con más desempleo de Mallorca, según los últimos datos hechos públicos por la Conselleria de Treball i Formació que corresponden al mes de mayo.

Otro dato a tener en cuenta es que más de la mitad (54%) de las personas registradas como parados en las oficinas de empleo de Balears residen en Palma.

Zonas turísticas como Alcúdia (140'6%), Sant Llorenç (66'45%), Santa Margalida (120'24%), Son Servera (102'05%) o Pollença (109'30%) continúan con un alto número de trabajadores en situación de desempleo.

Es Raiguer es la comarca de Mallorca donde el paro experimenta un mayor incremento. Así, municipios con importante actividad comercial como Inca o Lloseta, el incremento del paro supera el 60 por ciento. En la capital de la comarca, Inca, se han registrado 2.559 parados frente a los 1.449 de mayo de 2008.

En Lloseta los desempleados han pasado de 239 en mayo de 2008 a 461, un 92'88 por ciento más, este pasado mes de mayo.
En Manacor el paro también se ha disparado pasando de 1.469 parados en mayo de 2008 a 2.812 este año con un incremento del 91'42 por ciento.
Los pueblos del Pla de Mallorca tampoco viven mejores momentos, Sant Joan (126'31%), Porreres (117'54%) y Petra (112'16%) los datos también son preocupantes.

Y si los datos del paro de mayo en comparación con el año anterior no son positivos, tampoco lo son los que refleja la memoria del Tribunal d´Arbitratge i Mediació de les Illes Balears (TAMIB), presentada ayer por su presidenta, Isabel Guitart y la consellera de Treball i Formació, Joana Barceló.

La actividad del TAMIB ha crecido un 75 por ciento desde que empezó la crisis y un 43 por ciento en 2008 en relación a 2007.
Por lo que hace referencia a los cinco primeros meses de este año la actividad aumentó un 33 por ciento en relación al mismo periodo de 2008.
El pasado mes de mayo se abrieron 1.066 expedientes, una cifra récord desde que se abrió el TAMIB en 1999 y que sus responsables achacaron a que muchos fijos discontinuos interpusieron denuncias como medida preventiva ante el retraso en ser llamados a sus respectivas empresas para trabajar en la temporada turística, lo que les permite una mejor posición ante un despido improcedente y para lo que sólo cuentan con un plazo de 20 días.