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Las obras que el Ajuntament de Palma está ejecutando en 16 calles a cargo del Fondo Estatal de Inversión Local afectarán a 588 árboles. Cort conservará, tras realizar un estudio del estado en que se encuentran y mejorar su situación en los proyectos, el 49 por ciento de los árboles actuales, es decir, 290. El 36 por ciento se trasplantará y trasladará al vivero y el 14 por ciento, se talará. En números son 215 y 83, respectivamente, que suman 298 y se sustituirán por nuevos árboles.

Una vez finalizadas las obras en las 16 calles, el Ajuntament habrá incrementado el número de árboles en 140, pasando de 558 a 728. De esta manera, en total se plantarán 438 nuevos árboles.

El estudio elaborado por Cort ha sacado a la luz los principales problemas provocados por los árboles, que van desde raíces que se han adherido a las canalizaciones hasta copas que tapan semáforos o casas. También se ha detectado que 83 ejemplares están afectados por hongos o están podridos, por lo que se ha optado por talarlos para evitar que se caigan.

En tres zonas (Avinguda Argentina, Joan Alcover y Plaça Cardenal Reig) se renovarán todos los árboles. En Avinguda Argentina se talarán 22 ejemplares y se trasplantarán otros 11, mientras que en Joan Alcover ya se han talado 17 y se han trasplantado 102. Son los únicos lugares en los que no se podrá conservar ningún árbol. En la mayoría se aumentará el arbolado actual. Sólo en una calle se mantendrá el mismo, Nicolau de Pacs, mientras que en tres habrá menos ejemplares (Plaça Cardenal Reig, Francisco Sancho y Francesc Barceló i Combis). En las 12 restantes se incrementará el número de árboles.

El regidor de Infraestructures, Francisco Donate, resumió las diferentes actuaciones que se han contemplado en los proyectos. «Desaparecerán los árboles situados fuera de las aceras, que se ampliarán, y los ejemplares se alejarán de las fachadas», dijo Donate. El objetivo es, según Inma Gascón, jefa del departamento de Parcs i Jardins, que «el árbol tenga una situación más preferente». Donate aseguró que el objetivo es que, a finales de año, haya «1.000 árboles más que en la actualidad».