Rosa Estaràs y Francesc Antich intercambiaron críticas y reproches en la que fue su última pugna de la legislatura. Foto: M.A. CAÑELLAS

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El debate sobre la crisis económica celebrado ayer en el Parlament derivó en un cruce de acusaciones entre el president del Govern, Francesc Antich, y la portavoz del grupo popular, Rosa Estaràs. La líder del PP acusó al Govern de ser incapaz de afrontar la actual situación de crisis. Antich recordó el pasado y lamentó la falta de colaboración del PP.

El president del Govern comenzó el debate con una intervención donde explicó las medidas anticrisis de su gabinete, aseguró que Balears había vivido «excesos» y recordó la corrupción de la pasada legislatura. Antich cuantificó que las inversiones públicas generan 58.000 puestos de trabajo. «Todo el Govern está al servicio de la recuperación económica de nuestro país», garantizó Antich
La portavoz del PP se empleó con dureza en su cara a cara con Antich. Estaràs recordó que Balears es una de las comunidades con más paro y acusó al Govern de mentir sobre la crisis hace un año. «Ocultaron la crisis por motivos electorales», dijo Estaràs, quien cuantificó que en Balears hay cerrado 9.000 empresas desde que gobierna Antich. «¿Qué han hecho ustedes que no sean palabras? ¿Alguna cosa que se pueda tocar?», preguntó.

En la réplica, Antich defendió su política y atacó al PP. Recordó que en las comunidades donde gobiernan los populares la situación es peor que en Balears. Antich acusó a Estaràs de utilizar la crisis con motivos electoralistas. En su segunda intervención, Estaràs lamentó que Antich no le haya pedido ninguna reunión para hablar de crisis «porque se ha dedicado a resolver los problemas internos del Govern». «Los ataques al PP no dan puestos de trabajo, no llenan las neveras de los ciudadanos», cuestionó. Antich cerró el debate, pero rechazó responder con dureza a Estaràs. El president deseó suerte a la portavoz de los populares, que iniciará una nueva etapa política como eurodiputada. Durante el debate, el portavoz del Bloc, Biel Barceló, pidió a Antich valentía para sacar adelante los proyectos ferroviarios y reconoció que no es positivo hacer públicas las desavenencias internas.