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El Govern de Balears recibió ayer un clarísimo espaldarazo de los consells insulars, las entidades locales y el mundo empresarial y sindical para negociar la nueva financiación. Según el conseller Carles Manera, «negociaremos hasta la extenuación». Lo dijo al final de una sesión de trabajo sobre la situación económica de las Islas.

«Si hace falta cogemos la pancarta y nos vamos todos a Madrid». El que se expresaba ayer así era Lorenzo Bravo, secretario general de UGT. El tono de la declaración de Bravo no fue una excepción. La reivindicación ante Madrid marcó la sesión, tanto en declaraciones a los medios como en las intervenciones a puerta cerrada de representantes sindicales, empresariales y políticos.

Uno de los protagonistas de esa reunión fue el ex conseller de Hisenda del Govern y actual presidente del Cercle de Economia y portavoz de la plataforma en defensa de una financiación justa para Balears.

Forcades planteó constituir un «frente común» que también incluyera a todos los partidos. El ex conseller explicó que el PP había aceptado íntegramente el texto del Cercle que está sirviendo de guión al Govern en el proceso y se ofreció a mediar ante los 'populares' para que fuera de la mano del Ejecutivo en sus propuestas. Forcades aludió expresamente a la movilización social y no descarto que pudiera organizarse algún tipo de acto o manifestación.

Suma de apoyos

El presidente del Consejo Económico y Social, Llorenc Huguet, dijo que «es de justicia que Balears reciba lo que merece» y animó al Govern a no cejar en su propuesta. El conseller Manera, como ya informó ayer Ultima Hora, estaría dispuesto a decir «sí» a una oferta que supusiera 400 millones de euros más para Balears. «Hay que ir a por todas por que es de justicia».

Ni el president Antich ni el conseller Manera pudieron ocultar su satisfacción por el tono de la reunión aunque el conseller d'Hisenda indicó que los interlocutores son, en este momento, el Govern y el Gobierno central. «Bienvenidos sean todos los apoyos», dijo Antich en referencia a la posibilidad de constituir un frente común. No es la primera vez que se produce en Balears un movimiento de este tipo: a principios de los noventa, siendo Cañellas presidente, se constituyó la plataforma «Volem comandar a ca nostra».

El president, antes de acudir a la reunión, en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, ha subrayado que hará «toda la presión que pueda» al Ejecutivo central para que el nuevo modelo de financiación otorgue más importancia al incremento de la población y dijo que no aceptará un modelo «injusto» para las islas que no valore el incremento de población en los últimos años.

El peso de la población

Así, recordó que en los últimos nueve años, la población a crecido un 30 por ciento y, por ello, insistió en que esto se debe tener en cuenta en el nuevo sistema, ya que, en caso contrario, el Govern se planteará no participar en el modelo, debido a que «sólo le daremos apoyo si nos sentimos cómodos».

Por su parte, el conseller Manera mantuvo que «el proceso negociador sigue abierto» y que será una negociación «firme y dura». Afirmó que no le gustaría tener que decir 'no' pero insistió, como el día anterior, en que «antes que aceptar una financiación injusta es mejor quedarse como estamos».

«Negociaremos hasta la extenuación», dijo en un momento de su comparecencia. Insistió en no hablar de cifras pese a que el día anterior dio una. El conseller optó por hacer suya la amplísima horquilla que va de los 300 a los 790.

El conseller admitió la complejidad que supone para el Gobierno central la negociación con diferentes autonomías.

En los próximos días continuarán las conversaciones y el intercambio de documentos entre la Conselleria de Hisenda y el Ministerio de Economía.

El nuevo sistema de financiación, que será discutido en la segunda quincena de febrero en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, establece una serie de variables para ponderar las cantidades que corresponderán a las autonomías. Este diario publicaba ayer por primera vez la cantidad final resultante que correspondería a las Islas: 240 millones más al año. Al Ejecutivo esta cifra le parece insuficiente y reclama una cantidad que le sitúe en la media: unos 500 ó 573 millones más.