Algaida se enciende

La Banda de Música de Algaida acompañada de los cabezudos fue la encargada de iniciar la noche algaidina con un pasacalles invitando a todos los vecinos a participar de la fiesta. Los Dimonis infantils d'Alaró fueron los encargados de encender con su pólvora y fuego los foguerons que tenían que servir para la torrada más solidaria. Al precio de un euro destinado al hermanamiento entre Algaida y Ciudad Antigua, en Nicaragua, los botifarrons, la xulla y la llangonissa además de alimentar tenían un destino solidario lejos del fuego algaidí. Después de la torrada un buen trago de Herbes Dolces siempre viene bien, y es que el grupo folclórico puso la música de la ballada popular que llenó la plaza de Algaida y quitó el frío a más de uno.

Pero la parte más caliente estaba por llegar, el correfoc a cargo de los Dimonis d'Alaró convirtió el centro de Algaida en todo un espectáculo de fuego, luz y color. Decenas de dimonis invadieron la plaza con su fuego. El gentío congregado en la plaza optaba por ver el fuego de lejos, los más atrevidos se lanzaban a la plaza a bailar al son de los tambores y el ruido de los petardos y cohetes que salían en todas las direcciones posibles. No se querían perder detalle de cada uno de los movimientos de los dimonions. Otros preferían disfrutar del espectáculo desde lejos, por si las llamas, y los más pequeños que vencieron al sueño lo veían detrás de sus padres.

Pasada la media noche el ya tradicional remolque de s'Arrual Jazz Mort iniciaba su recorrido musical, circulando de fogueró en fogueró con un nutrido público que seguía sus clásicas melodías que sirvieron para calentar los cuerpos en la fría madrugada que se preveía para honrar a Sant Honorat.

Los actos festivos continua hoy durante todo el día en Algaida. Será por la mañana cuando se celebre la tradicional misa seguida del tradicional baile dels Cossiers. Una vez acabado se celebrará un refresc para todos ante el Ajuntament. lJ.Socies/G.Mas
Fotos: J.Morey.