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Los dos hermanos Hidalgo acapararon el arranque del segundo juicio del 'caso Andratx'. Ambos negaron saber que los terrenos en los que el restaurante 'El Grillo', propiedad de Juan Carlos Hidalgo, ocupaba un terreno protegido como ANEI. El ex alcalde andritxol, Eugenio Hidalgo, negó haber mediado ante los técnicos municipales para que éstos certificasen que el suelo era urbano. Juan Carlos Hidalgo excusó en su falta de estudios su desconocimiento del la clasificación de los terrenos: «soy un hombre muy corto en cultura; me he asesorado y nada más». Así, frente a las reiteradas preguntas del fiscal Pedro Horrach, aseguró que pensaba que el terreno era urbano; tanto antes de la compra, como cuando decidió convertirlo en restaurante. Los representantes del Ministerio Público le recordaron que en tres ocasiones pidió mediante una instancia que el Ajuntament d'Andratx aclarase la calificación de ese suelo. En dos de ellas, la contestación fue que era una zona rústica protegida. Lo mismo ocurrió con dos tasaciones encargadas durante el proceso de compra. Juan Carlos Hidalgo aseguró que él no se ocupaba de esos documentos y que se limitaba a escribir lo que su arquitecto, Francisco Muñoz -ya fallecido- y su abogado le dictaban.