La World Travel Market de este año ha puesto de manifiesto, una vez más, que las ferias son el lugar ideal para limar asperezas, dejar buenas sensaciones o, por el contrario, demostrar que no hay sintonía alguna.
El segundo día de feria, a falta de la celebración hoy del Día de Balears, con la presencia de Paco de Lucía, motivó más corros que nunca de hoteleros, representantes de touroperadores y políticos.
Y si hubo un tema que estuvo latente, por la presencia de uno de sus protagonistas, Romeo Sala, éste fue sin duda el torneo de Golf Mallorca Classic, al cual apoyan todos los hoteleros, entre ellos la Federación Hotelera de Mallorca, tras la decisión del conseller Francesc Buils de anunciar la retirada del patrocinio global del mismo.
Pere Cañellas, Romeo Sala, Antoni Horrach y hoteleros, están a la espera de que el Govern concrete su amenaza, pero al mismo tiempo esperan una actitud positiva para que el torneo se celebre en 2008. El conseller Buils, que ha estado más dinámico que nunca en Londres por las reuniones que ha mantenido con el sector turístico, dejó ayer claro que “el Govern ayudará a conseguir financiación privada a los organizadores del Mallorca Classic". El mensaje subliminal es más que claro: habrá torneo, pero con financiación privada.
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