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Científicos internacionales reunidos en París han sido tajantes a la hora de determinar cuáles serán las consecuencias del calentamiento global a corto y medio plazo y quién es el prinicipal causante de este fenómeno. La culpa es del hombre, que influye hasta en un 90 por ciento en el cambio climático, algo tan obvio como la falta de interés de determinados gobiernos para frenar el calentamiento.

España no se va a quedar al margen de unas graves consecuencias que van a provocar durante este siglo un descenso de las lluvias en verano y un aumento de las temperaturas en general. Las perspectivas son peores que las que se presentaron en el informe de 2001 y es que los científicos han constatado una aceleración del calentamiento de la Tierra.

La responsabilidad es de todos. El informe de los científicos es contundente y representa una clara llamada de atención a los gobiernos para que inicien serias negociaciones de cara a un nuevo acuerdo mundial. El cambio climático es una realidad fuera de toda duda y, aunque la sociedad poco a poco va tomando conciencia del problema, estamos todavía lejos de considerarlo una cuestión de primer orden.

El calentamiento se acelera, las lluvias se van a reducir un 20 por ciento en España y las olas de calor serán intensas. Todo ello habiendo firmado el procolo de Kyoto, que pretendía frenar, sin conseguirlo, el cambio climático.

Urge un acuerdo internacional de mayor alcance capaz de comprometer a los gobiernos, un acuerdo efectivo y eficaz que implique a todos los sectores. Es la única manera de tomar en serio un grave problema que, por el momento, crece sin control, aún sabiendo que todos somos los responsables de las consecuencias del cambio climático. La Tierra pide ayuda y no se la estamos dando.