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El príncipe Guillermo, hijo de Carlos de Gales y de la desaparecida Lady Di, eligió las Pitiüses para relajarse durante los días de asueto que tiene en la academia militar de Sandhurst donde estudia para graduarse como oficial del Ejército Británico. El heredero al trono de Inglaterra llegó el lunes con su novia Kate Middleton y se alojó en una casa del interior de la isla para pasar una semana de descanso que tenía previsto finalizar hoy. Guillermo se embarcó el viernes por la tarde rumbo a Formentera junto a un grupo de amigos y la joven Kate. Una vez fondeados en la pitiusa menor, el grupo disfrutó de una tarde soleada, en la que no faltaron largas charlas de pareja en la proa de la embarcación entre el príncipe y su novia, ambos de 24 años.

Tras refrescarse en el mar, el príncipe y sus amigos decidieron descubrir el famoso barro de la isla s'Espalmador, muy popular por sus supuestas propiedades beneficiosas para la piel. Guillermo volvió a la playa teñido de barro hasta el cuello, al igual que sus amigos. Su estancia en Eivissa coincide con el noveno aniversario de la muerte de su madre Diana de Gales. La noche anterior al aniversario, el príncipe estuvo en Pachá pasándoselo muy bien en la fiesta Subliminal del DJ Eric Morillo.

L. Aversa