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NEKANE DOMBLÀS
La alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, no tendría mayoría absoluta si las elecciones se celebraran ahora. Al menos esos son los datos que refleja una encuesta realizado por Unió Mallorquina. Según esta encuesta, elaborada el pasado mes de abril con llamadas telefónicas a 1.546 palmesanos, el PP perdería un concejal y pasaría de 15 a 14. Los socialistas alcanzarían los 12 concejales (ahora tiene nueve) y Unió Mallorquina, partido que no tiene representación en Cort, lograría tres ediles.

Si se confirman los datos que refleja la encuesta de los nacionalistas, Unió Mallorquina sería clave a la hora de formar gobierno. Miquel Nadal, candidato de los nacionalistas tendría el privilegio de pactar con PP o con PSOE ya que ambos partidos necesitarían sus votos para formar gobierno.

EU-EV y PSM sufrirían un monumental descalabro ya que pasarían a ser fuerzas extramunicipales ya que ninguna de ellas lograría el cinco por ciento mínimo que se exige para tener representación en Cort. El partido de Eberhard Grosske tiene en estos momentos tres concejales y el PSM, dos.

La pérdida de un concejal por parte del PP se explica como consecuencia del desgaste de un partido que lleva gobernando en Palma quince años ininterrumpidamente. Además del excelente resultado de UM, destaca el notable aumento del PSOE, que no se resiente lo más mínimo por el hecho de no haber decidido aún quién será su cabeza de lista.

Esta buena expectativa de votos del partido que lidera Francesc Antich se entiende en clave nacional. Es decir, que la subida del PSIB se debe al 'efecto Zapatero', que arrastraría votos para sus correligionarios en Palma.