Torres Blasco10/05/06 0:00
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La Delegación del Gobierno rechazó en Balears el 9% de las solicitudes presentadas en proceso extraordinario de «normalización» de inmigrantes trabajadores que se inició hace un año, según datos del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Fuentes de las organizaciones de inmigrantes, colectivos de apoyo e, incluso, fuentes oficiosas de la Administración autonómica estiman que, sin embargo, un año después del inicio del proceso de regulación, habría en Balears unos 20.000 trabajadores «sin papeles». Estos datos parten de extrapolaciones del crecimiento de los padrones municipales. Desde la Delegación del Gobierno, sin embargo, se alega que difícilmente se puede llevar un «no registro» de inmigrantes y se remiten a los datos dados a conocer al final de la campaña.

Al proceso de normalización se presentaron 21.445 expedientes de los que se resolvieron favorablemente 19.518. El 9% quedó sin normalizar, aunque con las revisiones es posible que el número alcanzara los 20.000. «Lo importante -dijeron desde la Delegación del Gobierno- es que hace un año había 20.000 personas fuera del mercado laboral y hoy están plenamente incorporadas». El 55,05% de las regulaciones del proceso realizado el pasado años correspondieron a hombres y el 44,95% a mujeres, según datos oficiales. La proporción estatal es prácticamente idéntica: el 55,89% fueron varones y el 44, 10%, mujeres. Es frecuente, según organismos vinculados a los sectores de la inmigración, que «los hombres» vengan como avanzadilla y que una vez encuentran un trabajo sus parejas decidan acompañarles. Además, según fuentes de la Conselleria de Presidència y del Institut Balear de la Dona, la presencia de inmigrantes sin papeles es habitual en sectores como la prostitución.

La Conselleria d'Immigració evitó ayer hacer una valoración oficial sobre personas que podrían hallarse ahora «sin papeles», argumentando que carecen de competencias, si bien se remitieron a fuentes relacionadas con el mundo de la inmigración para concluir que «es posible» que hubiera «20.000», es decir, el mismo número que logró su normalización. El Partido Popular (PP) ha criticado el «efecto llamada» que pudo tener el proceso de regulación. Fuentes socialistas mantuvieron que lo que debe hacer la Conselleria es «ocuparse de los inmigrantes y emigrantes, más que de las casas regionales». La Conselleria d'Immigració ha puesto en marcha una campaña de empadronamiento de extranjeros y ha explicado que eso es imprescindible para regularizar su situación y obtener las mismas ventajas que otros residentes. Sin embargo, lo que está claro es que ya no habrá un proceso extraordinario de regulación laboral por arraigo. A partir del proceso extraordinario, habrá que seguir los trámites habituales.