Un grupo de inmigrantes hace cola ante la sede judicial de Sa Gerreria.

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Los ciudadanos extranjeros han presentado, hasta el pasado 30 de noviembre, un total de 603 recursos en el Juzgado Decano de Sa Gerrería, un 157% más que en todo 2004, que finalizó con 235 asuntos tramitados.

En julio del pasado, cuando se puso en marcha un dispositivo especial para agilizar los trámites en el proceso de regulación de extranjeros, los extranjeros pendientes de obtener un permiso de trabajo -imprescindible para ser contratado legalmente- eran 8.479.

Los recursos se han interpuesto por denegación de los permisos de trabajo y residencia, visados, expulsiones y asilo político. El aumento más espectacular se ha registrado en la denegación de los permisos de trabajo y residencia, que han pasado de 106 en 2004 a 519 en los primeros once meses de este año, lo que supone un crecimiento del 390%.

«Ese aumento de los recursos obedece al proceso de normalización de ciudadanos extranjeros en situación irregular iniciado este año, y esas cifras coinciden con el aumento, también, de la entrada de asuntos en el turno de oficio de Extranjería en el Colegio de Abogados», explicó la coordinadora de extranjero del Colegio, Margarita Palos.

A principios de 2005 se iniciaran 800 nuevos expedientes de permiso de trabajo, cifra que da idea de la elevada presencia de población inmigrante en las Islas, una comunidad que está a punto de alcanzar la cifra de 100.000 extranjeros «con papeles». No es ajena a la incorporación de trabajadores extranjeros al mercado laboral, el continuo aumento de afiliaciones a la Seguridad Social que se produce en las Islas.

Para poder ejercer una actividad lucrativa, laboral o profesional, por cuenta propia o ajena, los extranjeros han de obtener previamente la correspondientes autorización, que se expide en forma de permiso único de trabajo y residencia. Para la concesión de esta autorización, se tiene en cuenta la situación general del empleo en España y se fijan una serie de contingentes anuales.