TW
0

Hace años que en las vías de Palma los transeúntes empezaron a tomar contacto con un rutilante baile callejero que importado de Estados Unidos, donde arrasó, era seguido por algunos jóvenes, quienes ataviados con el correspondiente equipo musical a todo volumen, exhibían sus dotes rítmicas dando volteretas y contorsiones a ras del suelo. Había llegado ebreak dance, un producto de la cultura marginal urbana. Con el objetivo de ofrecer una actividad lúdica entre la juventud y a la vez dar un aire de vida social a todo un barrio durante el verano, el Casal Llevant del Ajuntament de Palma ofrece durante los meses de junio, julio y septiembre, dentro del programa «Poset en marxa», unos cursos todos los lunes de las 18.00 a las 19.30 horas, orientados por un monitor profesional y abiertos a la iniciativa de los alumnos inscritos, diez en total, dedicados a esta modalidad de baile junto al hip hop, que culminará con una fiesta coincidiendo con el inicio de curso.

Si bien esta danza rompedora exige particular destreza y agilidad a la hora de sincronizar los movimientos a la vez que energía en los brazos, los cuales deben sostener todo el cuerpo durante las volteretas, no esta restringida a los más jóvenes, ya que se ofrece a un abanico de 14 a 30 años.

Sin embargo, ante nuestra presencia predominaba un ambiente muy juvenil y mayoritariamente masculino. Esta es una de las facetas debreak dance y que en el Casal LLevant reúne alumnos de diversos orígenes étnicos en una imagen que vale por mil palabras del nuevo fenómeno social del milenio que ha originado el actuamelting pot mallorquín.

G. Alomar